Arnold Schwarzenegger y su fórmula para alcanzar la felicidad en solo cuatro palabras
El actor tiene muy claro que encontrar un propósito en la vida es un componente esencial de la experiencia humana
"Puedes ser la persona más rica del mundo y estar completamente deprimido", advierte el protagonista de 'Terminator'
Los consejos de Arnold Schwarzenegger sobre la depresión a un fan
Alcanzar el éxito no tiene por qué implicar ser feliz, pero Arnold Schwarzenegger, de 77 años, puede presumir de haber logrado ambas cosas. Ciertamente, el éxito tuvo que trabajárselo. Comenzó su carrera profesional en el fisioculturismo antes de dar el salto al cine y convertirse en una estrella del cine de acción con títulos como 'Terminator' o 'Conan el bárbaro'. Sin embargo, no tuvo que luchar tanto por la felicidad. "Siempre fui feliz", ha admitido en 'The Rich Eisen Show' a propósito de su libro 'El poder de ser valiosos'.
"Es increíble, si lo piensas, cuánta gente está descontenta. Cuántas personas están enfadadas...", reflexionaba en el citado podcast. Sin embargo, Arnie no se siente así. Levantar pesas cinco horas al día, ayudar a sus conciudadanos de California, preparar cualquier nuevo proyecto... son actividades que al actor le han servido para estar siempre satisfecho consigo mismo, contento y alegre.
Sentido de propósito
La particular fórmula de la felicidad de Schwarzenegger se resume únicamente en cuatro palabras, un lema que podría parecer demasiado simple o ingenuo para afrontar todos los reveses que reserva la vida, pero que, según la psicología, es más profundo de lo que parece y resume un componente esencial de la experiencia humana: el sentido de propósito.
"Mantente ocupado. Sé útil", son esas cuatro palabras que han guiado el camino del actor de 'Desafío total', un mantra que se le quedó profundamente grabado quedó "durante sus años de formación y lo impulsó a un viaje de por vida de crecimiento continuo".
¿El dinero da la felicidad?
En una publicación de su newsletter personal, The Pump Daily, Schwrazenegger reflexionaba sobre si el dinero es el camino a la felicidad. Se mostraba de acuerdo en que "puede comprarte muchas comodidades, y puede hacerte la vida mucho más fácil", pero no creía que la comodidad o las facilidades sean lo mismo que la felicidad. Puedes ser la persona más rica del mundo y estar completamente deprimido".
"Creo que todos deberíais intentar ganar todo el dinero que queráis. Pero si os falta algo en la vida y veis que el dinero y la comodidad que os proporciona no os hacen felices, creo que necesitáis encontrar un propósito. Necesitas ser útil. He conocido a mucha gente miserable, enfadada y rica", continuaba.
La leyenda del cine de acción daba un último consejo: "Si has intentado encontrar la felicidad y simplemente no puedes, un camino seguro es ayudar a otra persona. Todavía recuerdo que a finales de los 70, cuando fui a entrenar a atletas de las Olimpiadas Especiales por primera vez en Wisconsin, volví a mi habitación de hotel sintiéndome fantástico. Hablo de pura alegría. Me senté y pensé: '¿Por qué estoy tan contento? Hoy no he ganado dinero. No he ganado ningún premio'. Había devuelto algo. Me sentía útil. Esa es la verdadera felicidad".
