Unos antiguos amigos del padre de Marga y Mariano se han subido al barco con la intención de invertir en el crucero. Se trata de un matrimonio muy convencional y religioso que ha acudido acompañado de una de sus hijas más católicas: Macarena. Mariano será el encargado de velar por la seguridad de la joven, sin sospechar que no es tan modosita como parece…