Si antes anuncio nubarrones en las dos casas más famosas de Guadalix, antes se hubiera avecinado la tormenta. Ayer, este gato pitoniso decía que la "casa blanca inmaculada empieza a tener su mácula y la de color está a un paso de estallar". Pues bien, la jornada de ayer fue la del estallido, tanto a un lado como al otro. Jhota elevaba el tono de la discusión con Joaquín y Mireia, patada en el suelo incluida. Al rato, Julia y Patricia terminaban de estropear su relación, con la consecuente crisis de ansiedad de esta última.
Y en medio de las dos broncas del día, Edu y Laura recuperaban la conversación pendiente desde el domingo, Anup hacía una declaración de guerra, Marta filtraba entre bromas y veras una noticia bomba, Terry revelaba algo desconocido de una habitante de la otra casa, y Chari se sinceraba con sus compañeros confiándoles el drama personal de su relación con Rubén. Son solo algunas de las cosas que sucedieron ayer, convirtiendo ese día festivo en una jornada apasionante.
Vayamos por partes, que diría Jack 'el destripador'. Empiezo con la resolución de la discusión pendiente entre Edu y Laura. Ayer contaba que la madrileña le había adelantado a su compañero que le nominaría este jueves e iba a utilizar como razón para hacerlo el hecho de que hubiera contado cómo algunos habitantes de su casa estaban diciendo que perderían la prueba por culpa de los fallos cometidos por las 'caperucitas' (ella lo es) y luego se desdijera afirmando no estar del todo seguro de lo dicho.
La duda que me asaltó el domingo y aún ayer nadie fue capaz de resolverme es cómo piensa dar razones en sus nominaciones cuando en la casa blanca se ha nominado hasta ahora a bulto, debiendo pactar dos nombres entre todos y sin tiempo para que nadie dé razones. Bien es cierto que esta semana pueden cambiar esta mecánica, posibilidad que se reserva siempre el programa, pero nadie dice que vaya a ser así. A pesar de ello, Laura ha insistido una y otra vez en dar razones en su nominación de este jueves.
La aclaración anunciada está realmente pillada por los pelos y no sé si voy a ser capaz de explicarla. Resulta que Laura afirma lo siguiente: "No dije que iba a utilizar tu actitud como razón para nominarte, sino que después de haber quedado los dos en que dejábamos el tema y no íbamos a volver a tocarlo, te avisé de que obligatoriamente volvería al mismo el jueves cuando tuviera que dar mis razones para nominarte". ¡Y dale la burra al trigo! Venga a darle vueltas con las razones. Resumiendo, no es que le amenazara gratuitamente con nominarle sino que le avisaba de la obligación de faltar a la palabra dada por ellos dos sobre no volver a hablar del tema, pues ella lo tendrá que sacar a la hora de nominar. Cuando todos sabemos casi seguro que no será así.
Ahí comenzó una de esas discusiones singulares vistas en otras ocasiones anteriores con idénticos protagonistas. Me parece curiosa la forma de discutir porque nunca parecen tener la intención de resolver nada, dando vueltas y vueltas sobre el mismo asunto manteniendo cada uno inmóvil su postura, sin voluntad alguna de acercar posiciones. También se hace raro verles discutir en un tono elevado, pareciendo que están rebasando todos los límites de una charla amigable y se enemistarán seriamente, pero un poco más tarde siguen compartiendo mucho tiempo juntos, como si no hubiera pasado nada.
Eso sí, Laura le va a nominar. De eso no le salva nadie, aunque Anup se encargase ayer de liar la madeja e intentara convencer a Eduardo de una tercera interpretación. Decía el 'indio loco': "Ella no te dijo que te iba a nominar, sino que si te nominaba daría esa razón para hacerlo". Y Laura a dos metros, deseando saltar para aclarar el asunto. Al final lo hizo cuando Edu le contaba a Anup que ella le estaba machacando. Ahí pensé que se venía todo abajo, pero ya digo que un poco más tarde compartían cigarrillo entre los dos.
Antes de concluir la pendiente discusión entre Laura y Eduardo, este era testigo de cómo su amigo Anup (y en cierta medida también Laura) le hacía un evidente desprecio, burlándose casi de su incapacidad auditiva. Cuando menos, el 'agente A' se intentó aprovechar de esa circunstancia, lo cual he de confesar que me horrorizó. Ni más ni menos. Es una pena, porque es otro de mis favoritos, o al menos lo era hasta ayer. Anup y Laura charlan en el jardín mientras Edu hace el circuito de la prueba. Este se acerca a ellos y pregunta de qué están hablando, recibiendo en primer lugar la respuesta de Laura: "De Anup, que le pasó ayer una cosa y me la está contando". Edu repregunta al interesado y este le miente: "Es que estoy un poco triste porque echo de menos a mi mujer".
El programador informático es sordo pero no tonto, por tanto, no se traga la explicación de su supuesto amigo. Este contaba que Julia le odia: "Tiene algo contra mí desde el principio. Ya me lo dijo Patricia, pensaba que yo soy un rival fuerte". Edu se cabrea porque le están engañando y no quieren contarle de lo que hablan. Anup le responde con suficiencia: "No estamos hablando de ti, Edu", como si eso le debiera excluir de la conversación. Dice la frase popular que "secretitos en reunión son de mala educación", lo cual deberían tener en cuenta algunos en esa casa. Laura remata la faena: "Me está contando algo personal, si no te lo quiere contar a ti no tienes por qué sentirte mal". No tengo palabras.
Cuando Eduardo explica por enésima vez la causa de su molestia (le ha dicho que estaba hablando de una cosa cuando hablaba de otra, por tanto, le ha mentido), Anup utiliza un argumento tramposo como el que más: "No estábamos hablando de eso pero no es mentira que eche de menos a mi mujer". Un poco más tarde se aviene a contarle el problema de su enfrentamiento con Julia, y Edu le da su opinión poniendo pegas a la actitud de Anup en ese asunto.
Anup se siente contrariado al ver que no recibe la adhesión incondicional de su interlocutor. Debe pensar que después de hacerle el favor de compartir con él su problema al menos debería escucharlo asintiendo y sin rechistar, pero resulta que Eduardo no es de esos. Para terminar de hundir su imagen ante este gato cronista, el indio le dice: "A veces no sé si contarte o no contarte cosas. A veces no sé si entiendes o no entiendes. A veces no sé qué vas a opinar o qué no vas a opinar". Fatal, sencillamente fatal.
De entre las dos broncas de la tarde fuimos un poco más testigos de la ocurrida en la casa 2. De la otra apenas vimos fuera de contexto a Julia diciéndole a Patricia: "No voy a ser tan pringada como tú, que todo el mundo piensa que eres una pringada. Eres una bocas, eres una pringada, eres una conflictiva". Patricia salió llorando del salón hacia el 'confe' acompañada por Laura en medio de un ataque nervioso importante.
Lo de Jhota y Joaquín es la repetición de la jugada, el replay de sus mejores momentos, la moviola de una discusión ya habida anteriormente y que veíamos anoche mismo en el resumen. Ahí vimos a Joaquín quejarse de que unos comieran más que otros, especialmente los que no hacen esfuerzo físico. Se puede estar refiriendo a 'comodín' Terry o a 'caperucito' Jhota. Este se sorprende de que esté pendiente de lo que comen los demás, pero ayer demostró tener un control férreo de lo comido por todos sus compañeros. Si digo la verdad, lo cual acostumbro a hacer, creo que ninguno de los dos lleva razón.
La tesis del granadino es cuestionable, además de cambiante. No estoy seguro de que quien hace más esfuerzo físico merezca comer más. Cada uno administra y quema energías de forma distinta y Jhota, por ejemplo, es muy nervioso por lo cual puede que esté sometiendo a su organismo a un desgaste similar al de quien da cientos de vueltas al circuito de la prueba durante las nueve horas de cada turno. No olvidemos que sin ambición y un poco de inteligencia podrían limitar dramáticamente el número de vueltas que dan. Esta enésima discusión por lo mismo de siempre termina con dos salidas de tono de Jhota: amenazó con abandonar la prueba y le hizo un feo gesto a Mireia al chascar sus dedos como diciéndole que pasara de él.
La reacción de Mireia ofendió a Jhota y esto elevó aún más el tono de la bronca. Le dijo algo así como que se fuera con su mamá, porque ella no iba a seguir recogiendo sus cosas. Hablaban todos a la vez y era complicado entenderles bien, por lo cual casi me fío más de la reconstrucción de los hechos hecha posteriormente por ambos protagonistas al contarlo a algunos compañeros que por lo escuchado en el momento. Para Jhota su madre es intocable (como para todos, en principio). No ha tenido padre y tiene a su madre en un altar, ella lo es todo para él, como ha contado en alguna ocasión. Mireia debería haber tenido en cuenta esto para evitar mentar a la madre.
Aunque parezca increíble, en medio de esta proliferación de borrascas, personalmente me quedo con algo contado por Chari en un momento que el viento parecía despejar el cielo de Guadalix, llevándose las nubes y aclarando el horizonte. Con un poco más de tranquilidad en ambas casas, la gaditana decide sincerarse ante algunas de sus compañeras, a quienes contó lo que tal vez debería haber hecho saber antes a su novio Rubén. En este momento, en la casa 2 y aquí fuera sabemos cosas que él mismo desconoce. Me da pena Rubén, aún más después de lo de ayer. Pero la confesión también me acercó a una Chari sincera, menos frívola de lo que me ha parecido hasta ahora. Fue de esos momentos de gran realidad que nos regala a veces este programa, tan reales y tan crudos que hasta duelen.
Dice Chari: "Mi idea era decirle que le iba a defender y después de que entrase desaparecer de su vida completamente". No sé si le quería hacer un último favor, apoyándole en esta aventura, o quizá pretendía vivir la experiencia e intentar aprovecharse del paso de Rubén por el programa, como me apuntaba anoche Amaia en los comentarios. La discusión que se planteó fue tan interesante o más que escuchar el testimonio de Chari. Sensaciones distintas y encontradas en cada uno, aunque un sentimiento generalizado de lástima. Por uno, por el otro, o por los dos.
Contaba Chari que algunos días ni siquiera se acuerda de Rubén. Que la relación entre ambos estaba rota, y la separación vivida por ambos cuando él se había ido a Inglaterra primero, o de Erasmus más tarde (en Suecia, creo que dijo), habría facilitado cierto enfriamiento. Creo que no se ha atrevido a cortar con su novio antes. Está claro que no está en el mejor sitio ni el momento más apropiado para hacerlo, pero también entiendo lo que es aplazar cobardemente una decisión al día siguiente. Y luego un día más. Y pasado este plantearse dejarlo para después de vacaciones, o de tal puente, o cualquiera otra cita que atrase el momento. Al final el momento siempre llega, pero la cobardía de la que hablo hace que sea más tarde de lo recomendable.
En este caso no es que llegue tarde, sino que lo hace en esa extraña situación, según la cual Rubén no sabe que la relación está rota e ignora que su novia ha contado tal cosa a algunas compañeras de la otra casa y, por ende, a toda España (exageración que siempre me ha gustado). Los caminos de esta pareja se separan de forma triste. Mientras Chari cada vez se siente más lejos de Rubén, a este la pasa lo contrario y empieza a desear casarse con ella. Incluso sueña despierto con unos hijos fruto de esa pareja. Hoy por hoy, una pareja rota.
Me encantó una reflexión de nuestro/a amigo/a 7cabritos anoche, hablando del ruido de fondo de esta relación, especialmente ahora que andan rodeados de extraños y a la vista de todos nosotros. Este usuario/a ponía fondo musical a esta triste historia. Con el gran Sabina y 'Mucho Ruido':
Reservo para esta sección final dos cotilleos importantes. Chari intentó ir al 'confe' justo cuando Patricia aún estaba siendo tranquilizada por Pepa. Aunque son 'confes' distintos están ambos en torno a la sala de las cuatro puertas, también usada como sala de expulsión. Por esto pudo escuchar algo de jaleo y pensó que podía tratarse de Laura. Cuando lo contó en el dormitorio, Terry dice que no entiende cómo han metido en la casa a Laura con el problema de ansiedad que tiene. No es la única informada del tema, puesto que Chari apostilla: "Sí, está medicada y todo". Ni pongo ni quito palabra. Es más, no me importa si es así o no, más bien me escandaliza un poco que digan esto abiertamente, supongo que conscientes de lo que pueden estar perjudicando la imagen de esa compañera.
Marta va a pedir un test de embarazo. Lleva dos noches vomitando en su turno de hombres lobo, se siente una barriga más hinchada de lo acostumbrado y, para más inri, Yago le toma el pelo tan serio como de costumbre diciéndole que tiene cara de embarazada y él nunca se equivoca en estas cosas. Claro, si miramos las cosas de forma un poco más realista, lo de los vómitos estará motivado muy probablemente por el esfuerzo del circuito en la prueba (incluso por el alcohol de la fiesta que tuvieron el domingo), y la barriga puede ser porque está a punto de comenzar el periodo. Luego está el tema moral, en el que no me apetece mucho entrar. La gallega se dice contraria al aborto pero si la prueba de la rana diera positivo se marcharía del programa para abortar. O sea, soy contrario salvo si me afecta a mí mismo. Inequívoca doble moral.
Y mientras este gato medio insomne dormía un rato corto, Lmedina nos contaba dos detalles merecedores de su 'por cierto'. En la casa 2 hablaban de "Aquiles, el rey de los Hunos". Vamos bien. Al tiempo, en la casa 1, Patricia está segura de que Zeppelin pertenece a Emilio Aragón y José Luis Moreno. Dios nos ampare.