El partido ante República Checa seguramente ha marcado un antes y un después en la carrera de Iker Casillas con la Selección. Nuestro guardameta más internacional dejaba su lugar en el once titular después de muchísimo tiempo de protagonismo en Eurocopas y Mundiales. Sin embargo, el hecho de no haber defendido la portería de España no quiere decir que haya tenido un partido fácil. Entre que estaba sentado al lado de una mampara de cristal que atraía a curiosos y pesados y que España no marcaba, su segunda parte en Toulouse será muy recordada. ¿Quieres revivirla?