La Sagra, el secreto granadino

telecinco.es 01/10/2010 09:33

La Sagra es una montaña escondida. Rara es la persona que no sea una experta montañera o que viva en la zona para haber descubierto este enclave entre las localidades granadinas de La Puebla de Don Fadrique y Huéscar, cercano a la frontera noroeste de Murcia.

La belleza de esta zona ha sido plasmada negro sobre blanco por el propio José Saramago, vinculado a esta región del norte granadino gracias a su mujer, Pilar del Río, con familia en la localidad de Castril, cuyo aceite de oliva no tiene la fama que le corresponde. Ya se sabe, la mercadotecnia y sus secretos.

La cima de La Sagra llega a los 2.283 metros. Una vez que haces cumbre, ofrece un espectáculo paisajístico de primer nivel. La Sierra de María en Almería hacia un lado. La Sierra de Cazorla, Segura y las Villas hacia el otro.

La Puebla de don Fadrique tiene 2.600 habitantes y una extensión gigantesca de más de 500 kilómetros cuadrados lo que hace que tenga lindes con tres provincias distintas: Albacete, Almería y Murcia. Cercana a la localidad de Orce, famosa por los restos del hombre más antiguo de Europa, los “poblatos” también tienen un pasado con vestigios que van desde los neolíticos a los musulmanes, pasando por las edades del Cobre, el Bronce, los Íberos y los romanos.

El nombre antiguo de la Puebla era Voltonera, Volteruela, como me corrige con mucha celeridad Eva en un comentario. ¿Por qué? Era el final del territorio cristiano en las lindes con el Reino Nazarí de Granada. Reconquistado por navarros en la época de los Reyes Católicos pasó en el siglo XVI a manos del segundo Duque de Alba, Don Fadrique Alvárez de Toledo gracias a su labor para anexionar el Reino de Navarra a Castilla. Por eso en 1525 recibió su nombre definitivo con la coletilla de don Fadrique. La unión de la Casa de Alba a este territorio del norte de Granada es importante. Tanto que el heredero del ducado, recibe el título de Duque de Huéscar.

El turismo rural ha supuesto un realce de esta zona, tradicionalmente dedicada a la agricultura y a la ganadería extensiva. La mayor parte de la vegetación es pinar de repoblación, pinar autóctono y mucho arbusto y pastizal. La encina, común en el pasado, casi ha desaparecido de la zona, ahora dominada por los enebros, aladiernos y torriscos.

En su fauna reina el buitre leonado, aunque se puede ver al milano real y al alimoche, aunque castigados y vulnerables en la zona por culpa de los venenos. También hay poblaciones de ardillas rojas y de cabra montés, aunque no tanto como en la cercana Sierra de Cazorla.

La Sagra es una majestuosa montaña. Sueño de conquista de muchos montañeros por alguna de sus múltiples vías, sobre todo el invierno gracias a la copiosa nieve que suele acompañar a su cumbre hasta bien entrada la primavera. Se dice que su nombre se lo debe a la palabra árabe Zagra, que significa frontera.

Será por eso que se mantiene como una gran desconocida.