La cara salvaje de Cañizares

SANDRA SALINAS 13/02/2009 15:33

Pero las extravagancias de Cañi aumentan hasta tal punto decide lanzarse a Julián y besarle salvajemente. Primero, Julián trata de defenderse pero luego deja que Cañi le arranque el cinturón y le meta en el baño, una aventura a la que Jesús no duda en sumarse.

Bernardo, cuando se entera ve confirmados los rumores que recorren la oficina, cree que ella está muy confundida con su relación pero Julián cree que más bien es un problema de "necesidad".

Los nervios de Bernardo parecen no tener fin ya que incluso les ve besarse frente a la máquina de café. No ceja en su empeño “estoy dispuesto a comprometerme pero hay cosas que no voy a tolerar”. Finalmente, decide hablar claro con ella "Así no son las cosas. Contigo ahora sobran las palabras" pero Cañi sólo se formula preguntas en voz alta "¿Por qué uno es como es y no se puede cambiar?"

Finalmente, Bernardo piensa que su madre tiene razón y su novia no es más que "un pendón desorejado". Entonces parece que aparece la verdadera Cañi, totalmente ofendida. Bernardo susurra una disculpa y corre el encuentro de su enamorada, ella intentará lanzarse a su cuello pero le dice que “no soy un cualquiera, la primera vez tiene que ser algo bonito”.

Pronto descubrimos que no es que Cañi tenga un problema de doble personalidad, es que tiene una hermana gemela que ha decidido suplantar su personalidad. ¿Cómo pueden ser tan distintas? Virtudes de la genética.

Pero el malentendido parece haber avivado la relación de los tortolitos y hablan claro. Bernardo sorprende a Maricarmen diciéndole que “los compromisos son una cosa antiguada y si puedes mancillar nuestro compromiso con cualquiera también puedes mancillarlo conmigo” a lo que Cañi, sorprendentemente, responde: "venga, vale" ¿Era ella o su hermana gemela?