El atletismo español homenajea a Beitia: "Ha sido increíble vivir el aplauso del público de Madrid"

Como ya adelantó Chapado en la previa al 'Meeting', el atletismo español quiso dar las gracias a su reina. Antes del inicio de la competición de salto de altura, Beitia entró a la pista bajo la ovación de un público que se quedó este año sin ver competir al oro olímpico en Río.

Y es que la cántabra, a sus 38 años, puso fin a su amplia carrera el pasado mes de octubre, cuando su cuerpo ya dijo basta en un exigente 2017 de lesiones. Bajo el aplauso unánime, la pantalla del Centro Municipal madrileño mostró instantáneas de todas sus medallas, 15 metales internacionales.

Beitia estuvo acompañada de su inseparable entrenador, un Torralbo al que siempre mencionó en sus éxitos. Ambos posaron junto a Chapado en una foto de familia a la que se sumaron las saltadoras que compiten este jueves en Madrid. La gran dominadora mundial, la rusa Maria Lasitskene, le entregó un ramo de flores y Chapado un trofeo homenaje.

Como colofón, un vídeo titulado 'Beitia, diosa de las alturas' con declaraciones de sus seres queridos e imágenes de su tierra cántabra. "Ha sido increíble poder vivir el aplauso del público en Madrid", dijo la campeona olímpico en agradecimiento.

"Lo que he vivido hoy ha sido muy especial. Estar aquí en Madrid y recibir el homenaje de la Federación de Atletismo además de vivir el aplauso del público ha sido increíble, como también lo ha sido la sensación de subir a la colchoneta", afirmó la santanderina, muy emocionada.

Además, Beitia -de 38 años- reconoció que, a pesar de estar retirada de la actividad profesional, aún sigue ligada al mundo del deporte. "La vida ha sido muy generosa conmigo", manifestó la ya ex atleta española, que dejó el atletismo en octubre del año pasado.

"He podido estar con mis compañeras, hace cinco meses estuve aquí con ellas y ahora me toca verlo desde la grada. Sigo ligada al Comité Olímpico Español y haciendo muchas cosas relacionadas con el deporte y con el atletismo", sentenció Beitia.