Es una de las remontadas más épicas de la historia reciente de nuestro fútbol. El Barça logró marcar cinco goles en 45 minutos anulando los cuatro que había marcado Pantic (tres de ellos en el primer tiempo para ir al descanso 0-3). Sucedió en el cruce era de cuartos de final y los azulgranas acabarían ganando el título aquel año frente al Betis.