Vecinos del barrio de Usera en Madrid están sorprendidos ante la macroperación contra la mafia china. Creen que los chinos son una comunidad muy silenciosa y por ello no sospechaban de nada. Las calles de Usera se llenaron de agentes y nadie sabía lo que ocurría, ahora muestran su sorpresa con vivir al lado de pisos dedicados a la prostitución.