En el último año la vida de José Ortega Cano ha dado un giro radical y el diestro está feliz, sobre todo, con la recuperación de su hijo. "Está en una fase media alta de recuperación. Ha pasado lo peor y según se ve el día a día y las ganas de él influyen mucho", ha dicho orgulloso tras presentar un proyecto del centro en el que permanece ingresado José Fernando. "Este proyecto es para prevenir en edades jóvenes y no ir a a casos que casi no tienen arreglo. Este es el sitio que parece que había soñado para la recuperación total de mi hijo."
Un año después de su ingreso en la Clínica López Ibor, José Fernando está muy cambiado. Su familia se ha volcado en su recuperación y todos están muy orgullosos. "Toda la familia le apoya, su hermana está muy pendiente... Aquí te puedes quedar a dormir y compartir con él el fin de semana, que creo que es muy bonito y muy positivo."
Esperando la libertad condicional
Aunque ya disfruta de un régimen de semilibertad, Ortega espera con ansia la libertad condicional. "No sé lo que queda para la libertad condicional pero creo que poco. Ahora tengo mis normas. A las 00.00 h. tengo que estasr en casa y hasta las 08.00 h. no puedo salir."
Aún no hay fecha para la boda
Aunque en uno de sus permisos confirmó que se casaría con Ana María Aldón, la pareja aún no tiene fecha. "Estamos con otras cosas, que todo pase y que mi problema se arregle", ha dicho Ortega, que está muy orgullo de su mujer y su hija, que se han apuntado a un curso de diseño. "A Ana María la costura siempre le ha gustado y ahora ha visto cómo es esta enseñanza del diseño que tienen que saber dibujar, pintar hacen pareja preguntándose, yendo y viendo", ha dicho el diestro, que ha confirmado la buena sintonía entre su pareja y su hija. "Lo mismo están con la aguja que con el mandil."
La aparición de la madre de Chabelita
Padre de dos hijos adoptados, Ortega se ha mostrado un tanto molesto con la aparición en los medios de la madre biológica de Chabelita. "Me parece una frivolidad, es una decisión que está tomada, es toda una vida", ha dicho Ortega, que sabe que sus hijos lo tienen claro. "Los míos dicen que sus padres somos nosotros."