El 30 de julio de 2013, dos meses antes del asesinato de Asunta, Alfonso Basterra solicitó una cita con un psiquiatra para su mujer. El psiquiatra que atendió en ese momento a Rosario declaró ante el juez tras el asesinato de la menor y 'El programa de Ana Rosa' ha tenido acceso en exclusiva a su declaración en la que manifestó que la paciente estaba angustiada. "Solicitó la consulta Alfonso. Me dijo que era su mujer; luego que era su ex. La vi ese mismo día. Charo llevaba unos días deprimidas. Esos días estaba peor. Estaba muy angustiada."
Según manifiesta el psiquiatra, Rosario Porto presentaba un cuadro depresivo y se sentía sobrepasada. "Había roto con una pareja. Y esto le angustió mucho. Me dijo que tenía antecentes psiquiátricos. Llevaba tres o cuatro años con terapia psicológica. Y hace cuatro años tuvo una crisis de angustia. Detecté un cuadro depresivo. Los factores eran la muerte de su padre y la ruptura con su pareja. De la niña me habló poco. Se le veía bastante sobrepasada por la niña."
Quince días después de la primera visita, Rosario volvió a acudir al psiquiatra que le recetó Prozac y Orfidal. El 10 de septiembre, en su tercera visita, el médico decide aumentar la dosis de prozac.
Una semana después, el 18 de septiembre, Rosario acude por cuarta vez a consulta. "Las primeras visitas eran bastante breves. Las últimas un poco más extensas", explica el médico en su declaración, en la que manifiesta que con la medicación recetada se consigue estar más animado y se calma la ansiedad.
Rosario pudo ser ingresada en 2009 contra su voluntad
Tras asegurar que en 2009 Rosario Porto presentaba un cuadro de alteración psíquica intensa, el doctor Narciso Carrero ha acudido a 'El programa de Ana Rosa', donde se ha ratificado en sus palabras y ha asegurado que la paciente que el encontró hace 4 años era una mujer poco cooperativa. Durante su entrevista, el doctor Carrero ha manifestado que el primer ingreso de Porto podría haber sido contra su voluntad. Además, ante la intención de Aranguren de demandarle por revelar secretos, el doctor ha asegurado que nunca ha revelado lo que Rosario le dijo durante aquel ingreso. "Nunca me he referido a lo verbal, a lo que ella me podía haber dicho. Lo único que refería eran sus gestos y sus actitudes."