Loli le ha explicado a Mercedes Milá que había dejado los pollos sin arreglar con la intención de ayudar a sus compañeros y que aprendieran. Ella ha entrado en la casa como una concursante y no para ser la sirvienta de nada. Ha aclarado que no se va a tomar a mal si han hablado mal de ella por haber puesto orden en la cocina porque ella ha intentado hacerlo lo mejor posible.