‘Hechos reales’ descubre desde Perú el horror que vivió Patricia Aguilar, la joven captada por la secta Gnosis

Hace un año conocíamos la noticia: la familia de Patricia Aguilar aseguraba que su hija, con la mayoría de edad recién cumplida, se había fugado de su casa captada por una secta peruana.

'El programa del verano' pudo hablar con la joven al inicio de su huida, quien siempre aseguró que se había ido bajo su propio pie por "problemas en casa" vinculados a una mala relación con sus padres, algo que sus familiares siempre negaron. Ahora, la verdad que tanto repitieron sus padres, ha salido a la luz: Patricia Aguilar vivía en pésimas condiciones en la selva amazónica, captada supuestamente por el líder de la secta Gnosis, Félix Steven o 'Príncipe Gurdjieff'.

Los reporteros de 'Hechos reales' trasladados hasta Perú han descubierto cómo vivía Patricia Aguilar en la selva, pero también cómo vivió durante en su llegada a Lima: un piso lleno de pintadas, del que Patricia jamás salía sola y donde las ventanas permanecían totalmente tapadas para no comprobar los ritos que allí se realizaban, según cuenta el casero:

Alberto Aguilar pagó la gasolina de la Policía para que rescatasen a su hija

Precisamente en Perú lleva ya dos meses Alberto Aguilar, padre de Patricia, quien siempre mantuvo la versión que finalmente ha salido a la luz. A pesar de recibir los rechazos de su hija hace ya un año, Alberto ha dado todo su dinero con tal de recuperarla y permanecerá en Lima hasta que su hija vuelva a España:

Otra persona que se ha mantenido fiel en la lucha por conseguir la libertad de Patricia ha sido Noelia Grau, su prima y mayor confidente. Ha sido ella quien siempre ha comunicado las últimas informaciones a los programas de actualidad de Telecinco y quien ha confirmado en 'Hechos reales' que su prima regresará a España junto a su bebé en los próximos días:

Patricia no ha sido la única víctima española del líder de esta secta: otra chica que vive en el norte de España y que tiene ahora 17 años habría estado a punto de seguir sus pasos. Ahora, todas las víctimas de Félix Steven pueden regresar con sus familias junto a los hijos que han dado a luz durante su cautiverio, tras afrontar en un duro proceso la situación que han estado viviendo: