Andrés Lima dirigirá por primera vez un filme, con guión de Juan Cavestany

Cavestany firmó el libreto de la exitosa obra de teatro "Urtain", que retrata el ascenso a la gloria del boxeador José Manuel Ibar Azpiazu, 'Urtain', durante el franquismo y su posterior descenso a los infiernos hasta su suicidio en 1992, con la que Animalario se impuso con 9 estatuillas en la última gala de los premios Max.

En rueda de prensa en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo (UIMP), Andrés Lima ha explicado que el proyecto de dirigir el filme arrancará después de montar su próximo montaje, "Falstaff", que se estrenará el próximo 18 de marzo como una de las apuestas de la próxima temporada del Centro Dramático Nacional (CDN).

Se tratará de "una severa adaptación" de "Enrique IV", de William Shakespeare, que girará "en torno al personaje de Falstaff, como ya hizo Orson Welles en 'Campanadas a Medianoche'", ha afirmado Lima, que ha señalado "la amistad, la mentira, la política, y la lucha en las relaciones personales" como los temas clave del montaje.

El director de la polémica gala de los premios Goya de 2003, en que figuras del cine español entonaron el 'no a la guerra' de Irak, trabajará en estos temas en el "Taller de interpretación para actrices y actores profesionales. La amistad y la mentira", que imparte esta semana en la UIMP.

Además de dirigir la pieza, Lima formará parte del elenco "excepcional" de 14 actores que la interpretará, entre los que se cuentan Isabel Ordaz, Gonzalo de Castro, Ernesto Alterio o Carlos Canut, con el objetivo de "contar el cuento al público". "Vamos a respetar el texto de Falstaff desde la complicidad", ha asegurado.

Partidario de una mayor inversión pública, Lima ha denunciado que la "desatención" hacia el teatro por parte del Estado "hace muy difícil" organizar giras interesantes y obliga a recurrir como gancho a "actores famosos" y a "comedias ligeras". "Se hace difícil hacer Beckett, Kafka, Brecht o Valle-Inclán", ha manifestado.

En este sentido, Lima se ha mostrado convencido de que no son las ayudas públicas sino "el público y las compañías los que están manteniendo el teatro ahora, en la crisis".

Andrés Lima ha destacado que "hay una libertad genial por parte de los actores y un eclecticismo" que permite acometer cada proyecto con gran libertad, pero ha señalado que "cada vez se tiende más a la privatización absoluta de lo público", por lo que se prioriza la "comercialidad" y es más difícil poner en escena esos proyectos.