Okuda San Miguel llena de luz y color las calles de Boston

Uno de los artistas urbanos más populares en el mundo, el santanderino Okuda San Miguel, ha llenado la ciudad de Boston en Estados Unidos de sus increíbles esculturas multicolor.

Son animales y figuras poliédricas de gran tamaño, el trabajo de este artista lo encontramos ya por todo el mundo aunque empezó poniendo color a barrios humildes en nuestro país.

Ni lo suyo es simple fachada, ni desde luego, él es un hombre gris, allá donde reina la oscuridad, Okuda San Miguel lleva luz, color y arte. Este grafitero cántabro comenzó tiñendo de alegría un barrio y ahora su barrio es el mundo entero, tal y como él lo ve, geométrico, gigantesco y multicolor.

Antiguas iglesias, castillos del Loira, edificios enteros en París, Moscú o Budapest ya lucen su huella.

Ahora también Boston se ha rendido a los pies del surrealismo pop de Okuda, y él que se siente feliz en las alturas, mantiene firmes los pies en el suelo, ofreciendo gratis algunas de sus obras aunque otras alcancen los 60.000 euros.

Arte urbano, cada vez más cotizado, cada vez más triunfal en los museos aunque la calle siempre será lo suyo.