Blanco dice que el plan de infraestructuras de EEUU es positivo para las firmas españolas

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, anunció ayer un programa de inversión en carreteras y ferrocarriles que movilizará 50.000 millones de dólares (unos 39.000 millones de euros) en cinco años para estimular el crecimiento económico y el empleo.

En una entrevista en Telecinco, Blanco subrayó que pese al recorte de inversión anunciado, España invertirá durante el mismo periodo de tiempo 72.000 millones de euros en infraestructuras, más que Estados Unidos y que otros países de Europa.

El ministro aseguró no envidiar a los estadounidenses por el nuevo plan de inversión y apuntó que son ellos los que tienen "mucha envidia de nosotros", porque no tienen ni un sólo kilómetro de tren de alta velocidad y sus autovías son peores.

En ese sentido, anunció que España acaba de suscribir un convenio de colaboración con Estados Unidos por el que un grupo de ingenieros de Fomento trabajará durante dos años para cooperar en el desarrollo y planificación de la alta velocidad en el país.

"La noticia de Estados Unidos es positiva para las empresas españolas, que son pioneras en el desarrollo de infraestructuras y van a tener una oportunidad de poder superar el recorte de la inversión en España", que, no obstante, seguirá siendo el país de la Unión Europea que más impulsará las infraestructuras, afirmó Blanco.

Añadió que las empresas españolas están muy bien posicionadas en Estados Unidos y apuntó que desde el Ministerio están ayudando a su internacionalización.

En su opinión, el desarrollo de la obra pública española en los últimos años ha permitido "un gran desarrollo de nuestras empresas y nuestra tecnología, que es puntera en este ámbito".

Por otra parte, Blanco aseguró que España está "en un punto muy importante de inicio de recuperación" y de ganar en credibilidad en el que es "muy importante" lo que suceda con los Presupuestos.

Según el ministro, a pesar del problema del desempleo, la economía española está registrando datos y síntomas "evidentes" de recuperación, entre los que mencionó el aumento de los usuarios de los aeropuertos y, por ende, del turismo internacional.

Blanco pidió "aparcar a un lado" las previsiones de los expertos y recordó que hace un mes todos los analistas pronosticaban un crecimiento espectacular de Estados Unidos y que el gran problema de la recuperación económica iba a ser Europa y, singularmente, Alemania.

Ahora, "conocidos los datos de crecimiento, resulta que los diagnósticos no habían acertado", Alemania creció, lo que es bueno para las exportaciones españolas, y Estados Unidos decreció.

"Ya nada es lo que era y lo que funcionaba como dato indicador de empleo hace unos tiempos -como el crecimiento del PIB- probablemente no tenga nada que ver con lo que venga en el futuro", aseveró Blanco.

El ministro dijo estar seguro de que las reformas puestas encima de la mesa darán sus resultados a corto y medio plazo y que se creará empleo, aunque recuperar los niveles de antes de la crisis "llevará un poco más" de tiempo.

Pronosticó que los datos de crecimiento de la economía española en el tercer trimestre "seguirán siendo positivos" e insistió que estamos al inicio de la senda de la recuperación, aunque "nada volverá a ser como antes".