Endesa marca como "único foco de atención" el mercado ibérico, donde buscará oportunidades de crecimiento

En su discurso en la Junta General Extraordinaria de accionistas celebrada este martes por la compañía, el nuevo consejero delegado de la compañía señaló que Endesa, gracias a su posición de liderazgo en el mercado ibérico, está "perfectamente situada" para aprovechar las oportunidades que se presenten en el futuro, "como son la recuperación del mercado, el incremento de la producción de las centrales térmicas, la captura de nuevas oportunidades en Portugal o el desarrollo de nuevos productos y servicios de valor añadido".

Bogas subrayó que Endesa comienza esta "nueva andadura" en un entorno económico y de mercado que muestra señales de recuperación, como reflejan los datos de crecimiento del 5% en los últimos doce meses del consumo de electricidad de los clientes industriales y del 1,6% en la demanda eléctrica total el mes pasado, y con "un marco regulatorio más estable y sostenible".

Así, indicó que el nuevo plan industrial para el periodo 2014-2016, que prevé una inversión de 2.500 millones de euros, un 25% más de lo previsto en su plan anterior, se vertebrará sobre cinco prioridades estratégicas, que son aprovechar todo el valor de la nueva regulación, mejorar aún más la eficiencia operativa, maximizar el valor de la integración entre generación y comercialización, desarrollar nuevas tecnologías para mejorar la eficiencia de sus redes y acelerar el desarrollo de sus productos y servicios de valor añadido.

Del total de 2.500 millones de euros del montante destinado a inversión, 1.000 millones de euros se destinarán a la actividad de distribución, otros 1.000 millones de euros a la generación peninsular, unos 200 millones de euros a la generación extrapeninsular y otros 200 millones a comercialización, afirmó.

GENERACIÓN DE FLUJOS DE CAJA DE 4.000 MILLONES.

Además, estimó que el plan industrial supondrá una generación de flujos de caja operacionales de 4.000 millones de euros en los próximos dos años, con un resultado bruto de explotación (Ebitda) de 2.900 millones de euros en 2015 y de 3.100 millones en 2016, y con un resultado neto de 1.000 millones de euros en 2015 y de 1.100 millones de euros en 2016.

A este respecto, Bogas subrayó que esta "elevada" capacidad de generación de flujos de caja será "una base sólida" para mantener la nueva política de dividendos propuesta por el consejo de administración, consistente en pagar un dividendo de 0,76 euros por acción con cargo a los resultados de 2014 e incrementarlo como mínimo un 5% en cada uno de los dos próximos años. "Una atractiva política de dividendos que da respuesta al compromiso de asegurar la creación de valor y rentabilidad para nuestros accionistas", añadió.