Santander espera alcanzar los 25 millones de clientes digitales en 2017, un 45% más

Banco Santander se ha marcado como objetivo alcanzar los 25 millones de clientes digitales en 2017, lo que supondría un aumento del 45% respecto a la cifra actual, mientras que pretende lograr 17 millones de clientes particulares vinculados y más de un millón en empresas y pymes en este periodo de tiempo.

Así lo ha anunciado la presidenta de la entidad, Ana Botín, durante la presentación de los resultados anuales del banco a los analistas, donde ha señalado que Santander ha de ser un banco "sencillo, personal y justo".

Botín, que ha insistido en la necesidad de hacer de Santander un banco digital, ha destacado que la entidad se ha marcado como objetivo ser "el mejor banco comercial" contando con la confianza de clientes, empleados, accionistas y sociedad, y ha avanzado que su intención es crecer de manera orgánica.

POLÍTICA DE ADQUISICIONES MÁS ESTRICTA

En este sentido, ha precisado que la entidad será "más estricta" en cuanto a adquisiciones y ha subrayado que en este momento no tienen "ninguna prioridad" ni ninguna compra prevista. "Ser el mejor banco no significa ser el más grande", ha dicho.

Así, su intención es estar entre los tres mejores bancos en los mercados en los que opera de aquí a 2017 y crecer más en crédito que sus competidores, sin descuidar la rentabilidad.

La presidenta de Santander ha hecho hincapié en que los resultados de 2014 --el banco obtuvo un beneficio atribuido de 5.816 millones de euros, un 39% más-- muestran la "base sólida" de la entidad, algo que marca el camino para alcanzar un ROTE (retorno sobre capital tangible) de entre el 12% y el 14% en 2017 y una mora por debajo del 5% en ese periodo de tiempo.

En cuanto a mercados, Santander se marca como prioridad España y Portugal, donde quiere crecer en clientes digitales y en el sector de pymes y empresas, alcanzando los cuatro millones de clientes vinculados en 2017. En Reino Unido seguirá impulsando la 'Cuenta 1,2,3' y completarán la franquicia de pymes, mientras que en Estados Unidos trabajará para adaptarse al marco normativo.