La cita electoral y la reunión de la Fed animan el día en Wall Street

Las elecciones de medio término en Estados Unidos para renovar la Cámara de Representantes, un tercio del Senado, 37 gobernadores y otros puestos estatales y locales, y en las que se prevé un avance republicano que podría acabar con la hegemonía demócrata, influyeron en el ánimo comprador de los inversores.

Estos también siguieron muy de cerca el comienzo de la esperada reunión de la Reserva Federal (banco central) de este país, en la que se prevé que se lance un nuevo paquete de estímulo económico.

Aunque los temores sobre el alcance de esa medida se instalaron en los mercados hace una semana, en esta jornada predominó la confianza en que el banco central estadounidense lanzará un programa de compra de entre 100.000 y 500.000 millones de dólares en bonos del Tesoro a lo largo de los próximos seis a nueve meses.

El objetivo de esa acción es aumentar los precios de la deuda de entre dos y diez años, y reducir en paralelo la rentabilidad, que se mueve de forma inversa al precio.

La rentabilidad de la deuda, que a esta hora bajaba hasta el 2,59%, se toma como referencia para los préstamos a largo plazo, de manera que si se reduce, ello suele animar a las familias a gastar y a las empresas a invertir.

De cualquier manera, la decisión final de la reunión no se conocerá hasta este miércoles, cuando sea anunciada por el Comité de Mercado Abierto de la Reserva, que dirige la política monetaria.

Mientras tanto, los inversores se decidieron por las compras en Wall Street con la mirada puesta en esas medidas de estímulo y el desenlace de los comicios, lo que permitió que el Dow Jones de Industriales, su principal indicador, tocara su nivel más alto en más de seis meses al subir el 0,58% y cerrar a 11.188,72 puntos.

Por su parte, el índice compuesto del mercado Nasdaq ascendió un 1,14% y el selectivo S&P 500 cerró con un avance del 0,78%.

Esta primera semana de noviembre supone una de las más agitadas del año para los mercados: la cita electoral, la reunión de la Fed y la publicación de las cifras de desempleo este viernes se unen a la divulgación del estado del sector manufacturero y de servicios, así como a la publicación de múltiples resultados empresariales.

Entre las cuentas trimestrales que se presentaron este martes destacaron las del gigante farmacéutico Pfizer, que decepcionó a los inversores con unas cuentas peores de lo esperado, por lo que selló la sesión con un descenso del 0,96% y registró una de las pocas bajadas de los treinta componentes del Dow Jones.

La farmacéutica reveló que en lo que va de 2010 tuvo una ganancia neta de 5.367 millones de dólares, un 32% menos que en el mismo periodo de 2009, lo que atribuyó a diversos cargos relacionados con la adquisición de Wyeth.

Otros de los resultados presentados esta segunda jornada de la semana fueron los de la compañía de servicios financieros MasterCard, que al igual que lo hiciera la semana pasada su competidora Visa, reveló unas cuentas positivas, por lo que cerró la sesión con un ascenso del 2,92%.

La firma, con sede en Purchase (Nueva York), anunció que logró un beneficio neto de 1.431 millones de dólares en los nueve primeros meses de 2010, lo que representa un avance del 22,4% respecto de igual periodo del año anterior.

El sector financiero subió así un 0,73%, y también registraron avances destacados el sector energético, con un ascenso del 1,39%, el de materias primas (1,13%), y el tecnológico (0,99%).

En otros mercados, el dólar bajaba con fuerza ante divisas como el euro, por la que ahora se pagaban 1,4028 dólares, comparado con los 1,3887 de la sesión anterior, mientras que el crudo de Texas ascendió un 1,14% para situarse en los 83,9 dólares por barril.