El ariete del Atlético de Madrid Antoine Griezmann se ha mostrado feliz tras la victoria de su equipo ante el Celta (0-4), en un encuentro en el que el francés marcó dos goles y brilló con luz propia. Aprovechando las cámaras en la zona mixta, ha querido disculparse por las declaraciones que hizo tras el empate frente el Alavés en las que dijo que de seguir así, el Atlético pelearía por el descenso. "Fue un calentón, no debí hacer públicas las declaraciones que hice".