La ONU estima al menos 519 muertos y más de 1.700 heridos tras dos semanas de guerra en Yemen

"Estoy extremadamente preocupada por la seguridad de los civiles que están atrapados en mitad de estos combates tan duros", ha declarado Amos esta pasada noche, tras comunicar las estimaciones, basadas en informes de organizaciones humanitarias en diferentes zonas del país.

La secretaria general adjunta de la ONU ha hecho un llamamiento "a todas las partes involucradas" -- el Ejército yemení, los rebeldes huthis, la coalición internacional liderada por Arabia Saudí e incluso a la célula de Al Qaeda en la Península Arábiga -- a que "cumplan con sus obligaciones de acuerdo con el derecho Internacional" y "hagan todo lo posible para proteger a los hombres, mujeres y niños que están sufriendo las consecuencias de la guerra".

Además, Amos ha informado de que decenas de miles de personas han huído de sus hogares con destino a países como Yibuti o Somalia, a través del mar, por no mencionar que bienes esenciales como electricidad, agua o medicinas escasean cada vez más.

A pesar de los graves peligros que comporta la situación, Amos ha reiterado el compromiso de Naciones Unidas y sus socios humanitarios locales, como la Media Luna Roja de Yemen, así como las autoridades yemeníes, para enviar paquetes de ayuda de emergencia, generadores, agua potable, comida y mantas.

Amos ha terminado recordando que, antes de la escalada de violencia, Yemen ya era uno de los países más pobres del mundo y su población se encontraba en una situación "extremadamente vulnerable". "Espero que la paz, la seguridad y la estabilidad se restauren lo antes posible", ha concluido.