Explosión en México: el número de víctimas asciende a 89
Informativos Telecinco
20/01/201914:18 h.Además, 51 personas siguen hospitalizadas por el siniestro, ocurrido a raíz de una fuga en la tubería. El despliegue de las fuerzas de seguridad no impidió que cientos de personas de municipios cercanos acudiesen a la zona para recoger el combustible.
El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, ha prometido atender a las familias "de manera directa". "Esto va más allá de lo material, tiene que ver con lo humano, y no hay límites", ha destacado el mandatario este lunes en rueda de prensa.
El Gobierno analizará la situación de más de 80 poblaciones aledañas a los oleoductos con el objetivo de establecer un Plan de Bienestar con el que aspira a dar una "vida digna" a un millón de familias. Al mismo tiempo, también aspira a combatir el robo de combustible.
"Necesitamos el apoyo de los pobladores para ir aislando a los que han hecho de esta actividad ilegal, riesgosa, inhumana, un lucro", ha declarado López Obrador, en alusión a una práctica que le costaría a las arcas públicas mexicanas unos 65.000 millones de pesos (casi 3.000 millones de euros) al año.
La gente gritaba y corría mientras ardía en llamas
"Había muchas personas que se acercaban con bidones; mujeres, chicos, adolescentes. Se acercaban a la fuente hasta en camionetas para poder cargar. Y empezaron a jugar, a hacer barullo en donde estaba brotando el hidrocarburo", señaló Roselyn Sánchez, reportera de AM Hidalgo. Se cree que fueron a la concentración entre 600 y 800 personas
El robo fue interrumpido con el estallido y una columna de fuego que envolvió a los vecinos y dejó a 74 muertos en los alrededores de la tubería perforada.
"Las llamas estaban consumiendo todo lo que había alrededor", anunció el gobernador de Hidalgo, Omar Fayad, al descubrir lo ocurrido. Las imágenes captadas tras el estallido reflejaban a gente que gritaba y corría mientras ardía en llamas. Otros corrían, estaban en estado de shock u observaban las quemaduras de su cuerpo. En definitiva, esto se convirtió en una auténtica pesadilla de gente que huía con sus ropas incendiadas y manchas negras en la cara, los brazos y las piernas.