Conmovedor reencuentro de una pareja de octogenarios tras 100 días separados por el protocolo del coronavirus
George y Joyce Bell, una pareja de octogenarios, llevan 66 años casados
Los dos ancianos estaban ingresados en el mismo centro, pero no podían verse por el protocolo de coronavirus
Su reencuentro, en una habitación de una residencia, conmovió a todos los trabajadores que lo presenciaron
El coronavirus sigue sumando casos en el mundo y afectando a nuestra vida diaria y a los protocolos de los hospitales. George y Joyce Bell, una pareja de octogenarios que llevan 66 años casados, han estado 100 días separados debido a la situación derivada de la pandemia. Su reencuentro, en una habitación de una residencia del noroeste de Inglaterra conmovió a todo el personal.
George Bell, de 89 años, enfermó en su casa y tuvo que ser hospitalizado. Más tarde lo hizo su mujer Joyce, de 87. A pesar de estar en el mismo centro, no pudieron verse por las lesiones que ambos presentaban y por el protocolo por el coronavirus.
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Eso cambió el día en el que Joyce recibió el alta, el 19 de octubre. Un día después su marido se unió a ella en una residencia de ancianos, Tollesby Hall Care Home, en Middlesbrough, Inglaterra, que ha compartido varias imágenes del momento que emocionó a todos en su página de Facebook.
Was absolutely lovely being able to reunite Joyce and George who have been married for 66 years but due to unfortunate...
Posted by Tollesby Hall on Wednesday, October 20, 2021
El reencuentro de los octogenarios
“Todos lloraban en la habitación" y la mayoría “tuvieron que salir porque fue muy, muy emocionante”, ha contado Rachel White, del Tollesby Hall Care Home, en Middlesbrough, Inglaterra, a ‘People’.
“Cuando se reunieron, se podía ver cómo estaban de enamorados, incluso, después de 66 años juntos. Conmovió a todo nuestro personal”, ha agregado, recordando que “ella estaba muy emocionada y nerviosa por verlo”.
Joyce, por su parte, recordó al diario Daily Mail cómo fue el momento: “Le dije que siempre estaría allí para él, sin importar lo que pasase. Me abrazó con fuerza y me dijo que nunca más me iba a dejar”.