Gallardón dice que la política penitenciaria se basará en la Ley y en la disposición de cada preso a pedir perdón

El ministro de Justicia, Alberto Ruiz Gallardón, ha advertido de que la Constitución española "excluye" la figura de la amnistía y ha insistido en que la política penitenciaria del Gobierno "se basará siempre en la legalidad", por lo que las medidas que se adopten requieren de "una disposición individualizada" de los presos de ETA para pedir perdón y "reparar" a sus víctimas.

Además, ha asegurado que al cese de la violencia "gratuita, cruel y unilateral" de ETA, le debe suceder la disolución de sus estructuras y el desarme total.

Gallardón ha presidido este lunes la toma de posesión de Carlos Urquijo como nuevo delegado del Gobierno en el País Vasco, en un acto celebrado en Vitoria y que ha contado con la presencia de destacados dirigentes institucionales, políticos y mandos policiales.

En su intervención, Gallardón ha reconocido que, tras el cese "definitivo" de la actividad terrorista anunciado por ETA, la situación de Euskadi es "distinta" a la existente en 2004, cuando Carlos Urquijo fue designado por primera vez delegado del Gobierno, un cargo en el que sólo permaneció unos meses debido a la victoria del PSOE en las elecciones generales de aquel año.

El titular de Justicia ha subrayado que, en la actualidad, "la firmeza del Estado de Derecho y de la sociedad vasca y española han forzado el desistimiento de sus crímenes, esperemos que, de modo definitivo, de aquellos que intentaban imponer su modelo totalitario".

No obstante, ha explicado que "ahora es preciso que a ese cese de una violencia gratuita, cruel y unilateral le suceda la disolución de las estructuras, el desarme total y la entrega de cuantos medios puedan estar aún al servicio de quienes han tratado de esclavizar a los vascos y de amedrentar a todos los españoles".

"VÍCTIMAS Y VERDUGOS"

En esta línea, ha asegurado que es necesario permanecer "vigilantes" para "evitar que los recursos y mecanismos de la democracia sean empleados en su contra". Asimismo, ha avisado de que "resulta vital para la salud moral" de la sociedad impedir "que el sufrimiento y el sacrificio de tantos inocentes sea falsificado por quienes intentan rescribir la historia equiparando a víctimas y verdugos".

Tras expresar su confianza en que la firmeza del Estado de Derecho estará "bien representada" por Urquijo, ha subrayado la importancia de recordar "siempre" que la Constitución "establece la prohibición de los indultos generales", lo cual "es una forma de excluir la figura legal de la amnistía".

Además, ha destacado que la Carta Magna establece que la política penitenciaria ha de aplicarse de forma "individualizada" a cada preso. Según ha explicado, "la política penitenciaria del Gobierno se basará siempre en la legalidad, y en consecuencia exigirá una disposición individualizada por parte de los reclusos condenados".

VÍCTIMAS

Según ha precisado, esta "disposición individualizada" deberá ajustarse "a los requerimientos normativos", que establecen la necesidad de "petición de perdón y ánimo de reparación a las víctimas".

Gallardón ha asegurado que los damnificados por el terrorismo "estarán siempre en el núcleo de la política del Gobierno en el tratamiento de este asunto de vital importancia".

Por otra parte, ha destacado el papel "esencial" de la Administración de Justicia, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y de la Ertzaintza en la lucha contra ETA. Asimismo, ha asegurado que estos agentes "no bajarán la guardia en la protección de las libertades, de los derechos individuales y colectivos, y de los principios constitucionales".

Al margen del tema de ETA, Gallardón ha mostrado el compromiso del Ejecutivo central para colaborar con la Administración vasca en la lucha contra los efectos de la crisis económica.

URQUIJO

Urquijo también se ha referido a la situación generada tras el anuncio de ETA sobre el cese de su actividad, y ha comparado el momento actual con el que se encontró hace ocho años al tomar, por primera vez, posesión del cargo de delegado del Gobierno.

En aquel momento, según ha indicado, "el terrorismo seguía golpeando con fuerza" y despertaba una "importante complicidad" en algunos sectores de la sociedad vasca.

Por el contrario, ha subrayado que "hoy afrontamos una nueva situación, un tiempo de esperanza en el que, sin bajar la guardia y gracias al Estado de Derecho, estamos tratando de iniciar una nueva etapa de libertad en el País Vasco, que entre todos estamos obligados a consolidar".

Por otra parte, ha expresado su intención de contribuir, desde su nuevo cargo, a dar a conocer la contribución "del conjunto de los españoles" al desarrollo y progreso de Euskadi. Entre otras materias, ha recordado la aportación del conjunto de la sociedad española a las pensiones y a las prestaciones por desempleo.

AGRADECIMIENTOS

Urquijo ha agradecido la confianza de su partido y, en especial, del presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, para proponerle para el cargo. También ha destacado la labor de su antecesor, Mikel Cabieces.

Este último se ha felicitado por el hecho de que el nuevo delegado del Gobierno en el País Vasco pueda desempeñar sus funciones en una situación de cese definitivo del terrorismo.