PP propone una "reconversión integral" de zonas turísticas "obsoletas" y agilizar visados en algunos países

El Partido Popular quiere atajar los "problemas estructurales" que, a su juicio, tiene el sector turístico español, como "la sobreoferta en destinos maduros y obsoletos" y pretende hacerlo, entre otras cosas, favoreciendo una "reconversión integral" de las zonas turísticas "degradadas".

En el capítulo del programa electoral del PP hecho público este martes sobre el turismo, el partido liderado por Mariano Rajoy asegura que, si gana las elecciones, presentará un plan integral de turismo y simplificará la legislación que afecta a este sector.

Además, se compromete a mejorar y facilitar los trámites en los Consulados de España en países potencialmente emisores de turistas, para agilizar la concesión de visados turísticos.

Si llega a La Moncloa, el PP garantiza que potenciará la imagen de España como "destino turístico de calidad", modernizando y mejorando la red de oficinas de turismo en el exterior. En este ámbito incluye también la celebración de grandes acontecimientos culturales y deportivos y la promoción en el extranjero de la marca Paradores Nacionales de turismo.

PERSEGUIRÁ EL VANDALISMO EN ZONAS TURÍSTICAS

Asimismo, considera clave incrementar la percepción de seguridad como "factor indispensable" para el mantenimiento del turismo de calidad y asegura que perseguirá el vandalismo en las zonas turísticas.

Mientras tanto, aboga por desarrollar, en colaboración con el sector privado, planes específicos de desarrollo y promoción de "formas de turismo con alto potencial desestacionalizador", entre las que cita el turismo cultural, de naturaleza, el náutico, el deportivo, cinegético, gastronómico, enológico o "el turismo de golf".

Por otra parte, asegura que mejorará el tratamiento fiscal de aquellas pequeñas y medianas empresas turísticas que reinviertan sus beneficios en ámbitos que potencien su competitividad y la de los destinos turísticos.

En el capítulo de la industria, el PP se compromete a apoyar el desarrollo de iniciativas empresariales, a impulsar su internacionalización y a acometer las reformas estructurales necesarias para que las empresas españolas no se enfrenten a costes de capital y de producción más caros que sus competidores.

Igualmente, pretende garantizar la igualdad de condiciones de los sectores industriales que se benefician de sistemas de amortización acelerada respecto a sus competidores de la Unión Europea, defendiendo el actual sistema o adaptándolo con efectos equivalentes a la normativa de otros países. "Flexibilizaremos los requisitos necesarios para acogerse a la libre amortización", dice.