El monarca ha defendido que en la mirada al "pasado" de España, que ha abogado que se haga "sin nostalgia" y con "un gran respeto" hacia su historia, deben estar "siempre presentes, con un inmenso respeto también, todos aquellos que, víctimas de la violencia terrorista, perdieron su vida o sufrieron por defender nuestra libertad".
"Su recuerdo permanecerá en nuestra memoria y en nuestro corazón", ha continuado don Felipe, tras ser interrumpido por los aplausos del Hemiciclo. El Rey ha añadido que la victoria del Estado de Derecho y el "mayor afecto" de los españoles es "el mejor reconocimiento a la dignidad que merecen.