Muere de COVID-19 Miguel Angel Peiteado, médico rural jubilado que colaboraba en una residencia
Trabajó 30 años en el centro de salud del pueblo
Se contagió en la residencia donde colaboraba tras jubilarse
La localidad toledana de Villanueva de Alcaudete llora la muerte del doctor Miguel Angel Peiteado tras una intensa batalla en la UCI contra el coranavirus. Tenía 73 años y era muy querido entre sus vecinos y compañeros.
Padre, abuelo, y médico rural. Esa era su gran vocación, su gran hobbie al que consagró 30 años de su vida en el pequeño centro de salud de la localidad. Fue el mentor de muchos sanitarios que ahora recuerdan su sensibilidad y su calidad humana.
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Ya jubilado, se marchó a cuidar ancianos a una residencia de ancianos del pueblo, donde se contagió. Allí luchó contra el COVID-19 y a principios de marzo abasteció a todos de mascarillas con su propio dinero. Lo dio todo por esos internos, hasta su propia vida.
El Colegio de Médicos de Toledo lamenta la pérdida del médico, durante la madrugada del miércoles, y quiere trasladar sus sinceras condolencias a familiares y amigos de este compañero. Miguel Ángel Peiteado Martínez estuvo muy ligado a este colegio de médicos de cuya Junta Directiva formó parte desde el año 86 , primero como vocal de Médicos Titulares, hasta su nombramiento en 1993 como secretario general de la Corporación, cargo que ejerció durante 16 años, hasta 2009.
Peiteado Martínez fue homenajeado por el Colegio de Médicos de Toledo y recibió los galardones de "honorífico", su diploma y escudo colegial, durante la festividad de la patrona de los médicos Nuestra Señora del Perpetuo Socorro en junio de 2017.
Precisamente, la muerte de este facultativo nacido en Madrid, pero toledano de adopción, coincide con la noticia de este miércoles de que los sanitarios españoles que han combatido la COVID-19 han recibido el Premio Princesa de Asturias a la Concordia 2020, un merecido homenaje que ha sido ampliamente demandado por la ciudadanía.