Carretero recibió 18.000 euros para lograr la pensión para la madre de Campanario
INFORMATIVOS TELECINCO / AGENCIAS
11/05/201107:13 h.El juicio contra esta red acusada de obtener o intentar obtener fraudulentamente pensiones de incapacidad laboral comenzó el 11 de abril y celebró la última de las sesiones el pasado día 15.
Durante esas primeras sesiones el tribunal decidió sobre cuestiones previas planteadas por algunos de los abogados de los acusados, que intentaron que fueran anuladas las escuchas telefónicas realizadas durante la investigación de la trama. El presidente de la Sala Tercera de la Audiencia de Cádiz, Manuel Grosso, decidió finalmente dar por buenas las escuchas, como ya acordara la Audiencia Provincial en 2006 y en 2007.
Carlos Carretero, exjefe de la Policía Local de Ubrique y uno de los 25 acusados en este proceso, ha reconocido en la Audiencia Provincial de Cádiz que cobró por unos trámites con los que los beneficiados de la estafa lograban "acelerar" el proceso para obtener la incapacidad laboral.
En su declaración, Carretero, uno de los 16 acusados que han pactado con el fiscal aceptar su culpabilidad para reducir la petición de pena, ha asegurado que fue el inspector médico, Francisco Casto Pérez, otro de los acusados, quien le dijo que podía reducir "a tres o cuatro meses" los "dieciocho meses" que normalmente duraban los trámites para obtener las pensiones de incapacidad.
Así, quienes recurrían a él para obtener la pensión de incapacidad laboral podían cobrar "unas doce mensualidades más", por lo que él les pedía aproximadamente la mitad de esta cantidad como compensación.
Carlos Carretero ha desmontado las líneas de defensa de la esposa del torero Jesulín de Ubrique y de su madre, dos de las acusadas que no han pactado con el fiscal aceptar los hechos que se les imputan. El cabecilla de la trama ha contado que conoció a Campanario y a su madre en una cena en la que salió la conversación de ayudar a esta última, que tenía una invalidez sin derecho a prestación, a conseguir una incapacidad laboral permanente.
Casto le dijo que Torres tenía que cotizar algunos meses a la Seguridad Social y Carretero le hizo un contrato de un año como limpiadora de su asesoría, aunque sabiendo todos que no iba a realizar ninguna tarea.
El exjefe de la Policía Local de Ubrique no ha dudado en contar que un empleado suyo recogió toda la documentación de Remedios Torres en la casa de El Bosque donde vivía Campanario y que se reunió con ella en un hotel para pedirle que le abonara los doce meses de cotización a la Seguridad Social que había pagado él de su bolsillo.
También ha confesado que la madre de Campanario se negó a acudir a una cita médica que había concertado el inspector médico en el hospital Puerta del Mar de Cádiz y con la que, según éste, podría conseguir una pensión mayor. "Ella me dijo que no quería venir, que con la de 600 euros que le iban a dar tenía más que suficiente", ha apuntado Carlos Carretero, que ha explicado que, ante esta negativa y para que el inspector médico "no quedara mal" con un amigo en el hospital Puerta del Mar, envió en su lugar a la madre de su novia, aunque ésta "no tenía ni idea" de que iba a suplantar a la madre de Campanario.
Tras contestar a las preguntas del fiscal y de la abogada del Estado, Carlos Carretero se ha negado a responder a las preguntas de los abogados de las defensas.
La trama se descubrió y a Remedios Torres se le negó el reconocimiento de cualquier incapacidad, por lo que no llegó a percibir prestación económica alguna.
La declaración de los procesados está previsto que dure seis sesiones, hasta el 20 de mayo, dentro de un juicio que tiene previsto acabar el 10 de junio, tras dieciocho sesiones. EBP