Sindicatos policiales defienden el disparo de la táser en Orihuela como "mal menor"

Un mal menor, útil para evitar que otros ciudadanos, los agentes y el propio agresor resulten heridos. Así defienden los sindicatos policiales el uso general de la pistola táser, cuyo disparo inmoviliza al que lo recibe. Además creen que su uso ayer por primera vez por la policía local de Orihuela, Alicante, fue proporcionado y adecuado. Un agente disparó la táser a un hombre que golpeaba coches y un local de alterne y amenazó al policía. Tres minutos después de recibir el impacto, se levantó del suelo.