Vuelve la polémica de los toros embolados: un hombre de 71 años muere en Jérica

Vuelve la polémica. Un hombre de 71 años ha fallecido en los festejos taurinos de la localidad castellonense de Jérica tras ser embestido por el segundo toro embolado de la noche. Según han informado fuentes municipales a Efe el suceso ocurrió en la madrugada de este domingo, cuando se celebró el segundo de los toros embolados de la noche, pasadas las 1.30 horas.

El astado, según han relatado, entró a la plaza a la carrera, "barrió" las ratoneras a gran velocidad y embistió al hombre que se encontraba de espaldas y no se dio cuenta de que llegaba el animal. Tras la embestida, el hombre fue despedido contra los barrotes, donde se golpeó con fuerza, y el animal continuó la carrera hasta llegar directamente a los toriles.

El toro era el segundo de la noche de la ganadería de Fernando Machancoses, dentro de la semana taurina de 2018 de Jérica, que comenzó el pasado 17 de septiembre. El astado, según han relatado, entró a la plaza a la carrera, "barrió" las ratoneras a gran velocidad y embistió al hombre que se encontraba de espaldas y no se dio cuenta de que llegaba el animal. Tras la embestida, el hombre fue despedido contra los barrotes, donde se golpeó con fuerza, y el animal continuó la carrera hasta llegar directamente a los toriles.

El herido fue trasladado en ambulancia hasta el Hospital de Sagunto donde falleció horas más tarde, según las mismas fuentes. El toro era el segundo de la noche de la ganadería de Fernando Machancoses, dentro de la semana taurina de 2018 de Jérica, que comenzó el pasado 17 de septiembre.

¿Afecta a los toros el fuego?

Los toros sufren "un fuerte estrés y miedo" cuando se les coloca fuego en sus astas, según el Presidente de Veterinarios Taurinos, Juan José Badiola. Sin embargo, a pesar de su opinión, defiende el mantenimiento de los 'correbous', por ejemplo, en Cataluña. El mismo criterio lo esgrimen otros médicos vinculados a los espectáculos taurinos que, aunque reconocen que el fuego aterroriza a estos animales, muestran su rechazo a la prohibición adoptada por Cataluña, porque ven "el arte, la supremacía del hombre, una cultura que otros no pueden o no quieren ver".