Tras la primera gala, los concursantes de ‘¡Mira quién salta!’ han superado los nervios, o casi. Pero los miedos persisten y la dificultad aumenta. Los catorce saltadores se han enfrentado a nuevos retos, saltos más complicados, desde más altura y también nuevos saltos sincronizados en pareja.
Sin embargo, no todos se han atrevido con más, sobre todo en lo que respecta a la altura. Muchos y han llegado a los cinco metros, pero otros tienen pánico a los tres.
Víctor Janeiro le pone demasiado corazón a su salto
El torero se ha llevado sus costumbres de la plaza de toro a los trampolines, tanto que sus entrenadores le visualizaban poniendo banderillas. Víctor tenía miedo cuando se asomaba a la altura de su nuevo reto: "Desde aquí arriba te pegas unas hostias que no veas", decía. Sin embargo, hizo de tripas corazón y protagonizó un salto adelante desde la plataforma de cinco metros. Quizá tuvO un fallo, echarle mucho corazón y cometió un fallo. Eso sí, el jurado le premió con 30 puntos.
Fortu se supera aún más
No solo quiere saltar, Fortu quiere más: "estoy maquinando algún saltito especial para mis seguidores", confesaba durante sus entrenamientos. Tanto se lanzó que su entrenador tuvo que separarle de un bordillo durante un salto un tanto difícil. En su afán por superarse, Fortu protagonizaba en la segunda gala un salto adentro carpado de cabeza desde trampolín de tres metros: "Me he visto bien pero hay que ir superándose", decía Fortu y el jurado le valoraba con 36 puntos.
El mortal de Beatriz Trapote
Estaba aterrorizada en el entrenamiento. Beatriz Trapote tenía que hacer un salto mortal pero no podía evitar recordar la lesión que sufrió Piero practicando este salto. La reportera reconocía que iba un poco más lenta que el resto de sus compañeros, pero cuando se subió al trampolín no dudó en hacer su salto mortal. Sin embargo, la escasa altura de su salto le provocó las críticas del jurado, sobre todo de Pumares, que quiso comprobar con sus propios ojos lo que se sentía.
El salto de Olvido Hormigos
La concursante continúa preocupada por lo que de ella se pueda decir en la calle tras la difusión de un vídeo íntimo sin su autorización. Pero los concursantes han optado por la ironía y Fortu le proponía que se presenten juntos a alcalde. Polémicas al margen, Olvido finalmente se tiraba de una plataforma de tres metros haciendo un ángel adelante. Javier Illana reconocía su mérito, pero le recordaba que no podía aflojar las piernas porque "queda muy feo en este tipo de saltos".
El salto de Verónica Hidalgo
La modelo no tiene ningún miedo al trampolín, tampoco a la plataforma. Por ello, Verónica Hidalgo protagonizó un salto adentro encogido de cabeza desde un trampolín de tres metros. Boris Izaguirre se ponía quisquilloso con su salto, Carlos Pumares le defendía y el jurado técnico se dividía entre ambas opiniones, todos alabaron su salto, pero creen que la modelo se había quedado un pelín corta. Diferencias al margen, Hidalgo consiguió 31 puntos.
Escassi protagoniza el primer mortal y medio del concurso
El jinete ensayaba uno de los saltos más difíciles que se han hecho hasta ahora en el programa, para Javier Illana es "el concursante perfecto" y también "uno de los posibles ganadores". Sin embargo, él no se siente "ni muy orgulloso, ni muy especial". Escassi se subió al trampolín de tres metros e hizo el primer mortal y medio del concurso, solo hubo una crítica: demasiada fuerza en el salto y el jurado el valoró con 29 puntos.
Los nervios traicionan un poco a Raquel Mosquera
Raquel Mosquera bromeaba durante el entrenamiento. Dice que tiene "mucho airbag de serie", lo cual es bueno para evitar los golpes, pero también tiene su desventaja porque "se me ponen morados", decía entre risas. Lo cierto es que a Raquel la altura no le da miedo y se subió a la plataforma de cinco metros para hacer un ángel hacia delante. Pero los nervios le jugaron una mala pasada, las piernas se le doblaron en su entrada al agua pero el jurado le dio 31 puntos.
El salto de Dani
Dani tiene miedo a las alturas, no puede remediarlo y, por ello, sus saltos despiertan las suspicacias del jurado y hacen trabajar mucho a los entrenadores. Esta vez, el ex concursante de 'Gran Hermano' se atrevía con algo más difícil, un salto mortal adelante desde trampolín de un metro. Javier Illana se mostraba impresionado con su evolución, Lola lo calificaba como "un buen mortal" pero Carlos Pumares se burlaba de él: "no te vas a poder sentar de la culada que te has dado", le decía.
El salto de Mónica Pont
En su primer salto, Mónica Pont llegó al trampolín llorando y no pudo saltar hasta que logró tranquilizarse. Sin embargo, Mónica parece haber perdido el miedo ya que se subió a la plataforma de cinco metros para hacer un salto adelante agrupado de cabeza. Javier se mostraba crítico con ella, cree que ha perdido con respecto a la gala anterior, pero Lola le decía que había sido un buen salto ¿El resultado? 33 puntos.
El salto de Alessandro
Aunque fue de los últimos en llegar, Alessandro se ha puesto las pilas. No tiene miedo a la altura, tampoco a la complejidad del salto y, por ello, los entrenadores decidieron darle caña. Tanto que Alessandro se atrevió con un ángel atrás de cabeza desde plataforma de tres metros. Sin embargo, el italiano se relaja cuando llega al agua y tiene fallos en las manos y en las piernas con lo que el jurado le dio una puntuación un tanto baja, 26 puntos.
El salto de Lydia Lozano
Sin ninguna duda, para Lydia Lozano el problema es la altura. La periodista tiene pavor, no podía evitar las lágrimas durante el entrenamiento. Sin embargo, quiso superarse subiéndose a la plataforma de cinco metros para hacer una caída adelante de pie. Pero dudó, tanto que Jesús Vázque subió para acompañarla y así, dedicándole el salto a sus profesores y a su marido Charly, saltó desde los cinco metros. Eso sí, la escasa dificultad del salto solo le dio 20 puntos.
El salto de Antonio Rossi
Es periodista, pero también deportista y quería ganar, sin embargo, Antonio Rossi no logró efectuar un buen salto, su inseguridad sobre el trampolín le pasaba factura. El periodista hacía un salto hacia dentro encongido de cabeza desde la plataforma de cinco metros. Javier le explicaba que no puede dejar que su inseguridad se vea: "no puedes ir con miedo, porque eso se transmite y se penaliza". Finalmente, al periodista le daban con 25 puntos.
El salto truncado de Sonia Ferrer
Sonia es una de las concursantes más exigentes de '¡Mira quién salta!', no solo quería tirarse de cabeza, quería hacer algo distinto y, por ello, se atrevió con un ángel atrás con medio tirabuzón desde plataforma de tres metros. Sin embargo, se truncó, Lola le explicaba que se agarró lo brazos demasiado pronto y, por ello, caía de lado. Javier añadía que su salto requiere muchísima experiencia y ella no ha tenido poco tiempo, por lo que la valoraba positivamente. En total, Sonia obtuvo 27 puntos.
El magistral salto de Natalia Millán
Su miedo a las alturas hacía creer que Natalia Millán no podría con ciertos saltos pero ha demostrado que no es cierto. En la segunda gala de '¡Mira quién salta!', hizo un salto con caída hacia atrás de cabeza desde los tres metros: “Jamás habría creído que lo iba a hacer”, decía ella y el jurado premiaba su entrada en el agua, la más limpia de la noche, aunque le recordaba que había tenido que recolocarse en la plataforma antes del salto.
Pero hubo más. Los concursantes tuvieron que subirse de nuevo bien al trampolín, bien a la plataforma, para defender sus saltos sincronizados. Con esta itnervención, hallamos las puntuaciones definitivas de los catorce concursantes, un ranking liderado por Natalia Millán, seguida muy de cerca por su compañera de salto, Verónica Hidalgo y Fortu en tercer lugar.
Y todos no podían continuar, cuatro de ellos iban a ser expulsados. Jesús Vázquez reunía a los seis con puntuación más baja y enumeró a los cuatro eliminados: Lydia Lozano celebró la eliminación como una victoria besando a sus compañeros. Con 48 puntos, Olvido y Beatriz también eran eliminadas, seguidas muy de cerca por Antonio Rossi, eliminado con 50 puntos, solo uno menos que Aless, que se libra.