La pareja de cincuentones han contado la aventura vivida el pasado 18 de julio cuando fueron agredidos por una ballena. El velero navegaba en las aguas de Hermanus, un destino turístico muy popular situado a 80 millas al este de Ciudad del Cabo, cuando se percataron de la presencia del gigantesco animal.
Parecía nerviosa y pegaba saltos, pero "casi no había viento" por lo que no pudieron alejarse de él, han contado a los medios.
El cetáceo enfiló entonces hacia el yate e intentó sobrepasarlo de un salto cayendo de lleno sobre la embarcación que soportó a duras penas la embestida.
"Gracias a Dios que el casco es de acero y no de fibra, porque sino nos habríamos hundidos", contó Ralph Mothes, que salió ileso, junto a su pareja, del accidente.
El animal destrozó el mástil, pero los dos ocupantes salieron ilesos.
Por lo raro del incidente, las autoridades sudafricanas investigan si la ballena fue acosada por los ocupantes del Intrepid o de otra embarcación, ya que testigos presenciales aseguran haber visto a otro yate persiguiendo al animal momentos antes del ataque.