La gota que colmó el vaso fue el derrumbamiento del techo del juzgado número 2 el pasado mes de septiembre. La titular asegura que aquel día salvó la vida porque no estaba trabajando. Los ladrillos aplastaron la mesa de su despacho.
Los trabajadores denuncian que carecen de un lugar donde guardar las piezas de convicción, es decir, las evidencias que sirven de pruebas en procedimientos que aún están abiertos. Bajo las mesas de los funcionaros o detrás de las cortinas encontramos los palos utilizados en una pelea, una sierra mecánica o una pala con la que se produjo una agresión. Todo debería estar bajo llave, especialmente cuando se trata de armas. La Secretaria Judicial nos explica la situación. "Si se trata de armas como he tenido en otras ocasiones una escopeta, pues están en los cajones de armarios que tengo en el despacho que ni siquiera se pueden cerrar".
También reclaman más espacio y más intimidad a la hora de tomar declaración, ya que muchas veces tanto los detenidos como los testigos tienen que manifestar lo que ha ocurrido delante de ocho o diez personas a la vez.
Los archivos están saturados, un funcionario reconoce que debería estar ordenando el archivo, pero la falta de personal le obliga a estar en el juzgado atendiendo al público. El trabajo se acumula, y la acumulación de papel y la falta de espacio podrían ocasionar pérdidas terribles. La juez decana nos pone un ejemplo. "Cuando son documentos originales que presentan las partes nosotros intentamos ir guardando los expedientes, pero claro, no está en nuestras manos cuando cae el techo sobre ellos".
La Comunidad de Madrid asumió las competencias en materia de Justicia hace seis años. Desde la Dirección General de Justicia reconocen las carencias, y asegura que parte de las obras de reparación ya están en marcha. Quieres denunciar una situación o enviarnos alguna sugerencia? Contacta con nuestro equipo de Reporteros en los teléfonos 91/395 93 08 - 91/395 95 41 o mándanos un email a reporteros@informativost5.com. Gracias por tu colaboración.