"Todo es muy surrealista y devastador", dijo al rotativo neoyorquino Timolin, otra de las hijas del legendario Nat King Cole, quien explicó que Natalie recibió el lunes la feliz noticia de que había un riñón disponible para ella mientras se encontraba en el lecho de muerte de su hermana Carol.
Natalie Cole, que desde 2008 batalla contra una hepatitis C que le paralizó los riñones, se sometió unas horas después a un trasplante de riñón en un hospital de Los Ángeles (California).
"Natalie estaba al lado de Carol cuando el lunes por la mañana la llamaron para decirle que había un donante", relató Timolin, quien aseguró que la artista no quería separarse de su hermana moribunda pero los doctores la convencieron de que no podía desaprovechar la oportunidad de someterse al trasplante.
Mientras la ganadora de seis premios Grammy en 1991 por el tributo a su padre "Unforgettable ... With Love" se recuperaba de la operación, su hermana Carol fallecía víctima de un cáncer que le había sido detectado tan sólo una semana antes.
"Nuestra hermana no había ido al doctor en treinta años y la semana pasada acudió a uno y le encontraron una mancha cancerígena en el pulmón. Los médicos querían someterla a quimioterapia de inmediato, pero Carol se negó", relató Timolin.
El riñón que recibió Natalie Cole, que se sometía a diálisis tres veces a la semana desde el pasado septiembre, provenía de una "donación directa" gestionada por la agencia OneLegacy y llegaba de la familia de un admirador de la cantante, cuya identidad no ha trascendido, según explicó la compañía en un comunicado.
"La familia del donante pidió que uno de sus riñones fuera para Natalie Cole si resultaba compatible, ya que sabían que necesitaba uno para sobrevivir", explicó el presidente de la agencia, Tom Mone, en el mismo comunicado.
Natalie Cole anunció públicamente hace unas semanas, durante una entrevista con Larry King, en el canal de televisión CNN, que necesitaba un trasplante de riñón, momento a partir del cual recibió docenas de ofertas de donantes.