Con unos 40 minutos de retraso, pendiente de la influencia de la nube de ceniza procedente del volcán Eyjafjalla en el aeropuerto de Madrid-Barajas, el Atlético salió finalmente rumbo a Hamburgo , donde aterrizó superadas las 18.00 horas con la mente en el título de la Liga Europa, cuyo último obstáculo será el Fulham inglés.
Quique Sánchez Flores, entrenador del equipo rojiblanco, se ha llevado hasta la ciudad alemana a toda su plantilla, incluido los canteranos Borja González, delantero, y Joel Robles, portero, y el portugués Tiago Mendes y el senegalés Ibrahima Balde, aunque ninguno de estos dos últimos están inscritos para esta competición europea.
No viajó, en cambio, el guardameta Sergio Asenjo, ya que sufrió el pasado sábado, en el choque de Liga frente al Sporting de Gijón, una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla derecha y que será operado mañana, en la clínica Cemtro de Madrid por el doctor Pedro Guillén. Estará al menos seis meses de baja. Son las dos bajas del técnico para el transcendental duelo del próximo miércoles, la quinta final continental de la historia del Atlético, tras el título conquistado de la Recopa de Europa en 1962 ante el Fiorentina, también en Alemania, y las derrotas en 1963, contra el Tottenham (5-1); en 1974, frente al Bayern Múnich (1-1 y 4-0); y en 1986, ante el Dínamo de Kiev (3-0).
En el vuelo, además de la expedición, también viajaron los directivos del club, encabezados por Enrique Cerezo, presidente, y Miguel Ángel Gil Marín, consejero delegado, además de familiares de los futbolistas, entre ellos Benjamín Agüero Maradona, hijo del argentino Sergio Agüero, o Giannina Maradona, novia del Kun. También se desplazaron junto al equipo familiares de jugadores como José Manuel Jurado, Juan Valera, el argentino Eduardo Salvio, Antonio López, Álvaro Domínguez, José Antonio Reyes o David de Gea, entre otros futbolistas, en un avión completo para buscar el segundo título europeo de la historia del Atlético.
Preocupación por los aficionados
Una vez llegado el equipo a Hamburgo, la preocupación del club se centra ahora en los vuelos que entre mañana y el miércoles deben traer a los aficionados hasta la ciudad alemana para presenciar la final de la Liga Europa, después de que las previsiones de la nube de ceniza volcánica apunten al cierre de algunos aeropuertos. Más de 10.000 seguidores tienen entrada para la final y, por lo tanto, deberán volar a Alemania, la mayoría el próximo miércoles, aunque ya se barajan alternativas por la nube volcánica. El tren y el autobús, siempre con un trayecto en torno a 15 horas, serían los otros medios de transporte posibles para la afición
La gran final, en Telecinco y Telecinco.es
Y es que los de Quique Sánchez Flores no quieren sorpresas ante su gran final del miércoles, que se podrá ver en directo en Telecinco y Telecinco.es. El Atlético se juega la temporada Europea ante el Fulham inglés en Hamburgo.
Para el centrocampista Simao, que considera que serían un sueño ganar, "la final está al cincuenta por ciento, el Fulham tiene su mérito y hay que respetarle al máximo. Es una final con dos equipos que han hecho mucho por estar ahí y por eso está igualada, pero yo quiero ganarla y para ello tenemos que jugar a nuestro mejor nivel", apuntó el luso.
Simao, que quiere tener un papel protagonista en la final, reconoce que el miércoles será "un día importante para todos". "El jugar la final es algo que todos queríamos. La tenemos que preparar bien porque no va a ser fácil y queremos ganar. Estamos super ilusionados de jugarla", reconoció.
Por eso, el internacional luso advirtió que no se pueden fiar del Fulham que cuenta con "jugadores importantes". "La verdad que son fuertes en el conjunto y tienen jugadores fuertes adelante y atrás. Hacen el típico fútbol inglés y por eso tenemos que estudiarles bien para que no nos hagan daño principalmente a balón parado que es su fuerte. Queremos jugar nuestro partido y pensar en nosotros, si tenemos el balón, el Fulham lo va a tener difícil", reconoció.