España y Rusia están trabajando para mejorar y adecuar los protocolos de funcionamiento de exportación de productos cárnicos por parte de las empresas españolas, según desveló el ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete.
"Es verdad que ha habido problemas en Rusia en relación a las exportaciones de productos cárnicos. El Gobierno trabaja con las autoridades rusas para mejorar nuestros protocolos de funcionamiento y adecuarlo a los últimos requisitos en vigor de la normativa rusa", apuntó Arias Cañete, sobre la prohibición en Rusia de importar carne refrigerada procedente de España.
El titular de Agricultura subrayó que el principal objetivo ahora es "tranquilizar a las autoridades rusas de que se van a cumplir los protocolos de la Unión Europea". "El Gobierno español trata de solucionar este problema y volver a un mercado de exportación que es muy interesante para España", concluyó.
Por su parte, el Servicio de Vigilancia Fitosanitario y Veterinaria de Rusia (Rosselkhoznadzor) ha advertido a España de que si no toma medidas para solucionar el problema antes del 11 de abril, inclusive, se verá obligado a introducir "restricciones temporales" en las exportaciones de una serie de empresas españolas a partir del día 12.
El jefe adjunto del servicio de vigilancia, Eugene Nepoklonov, se reunió el pasado 27 de marzo en Moscú con el director general de Sanidad de la Producción Agraria del Ministerio de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Valentín Almansa de Lara, después de la inspección realizada por las autoridades rusas en empresas españolas.
Hace unas semanas, el responsable del organismo, Sergei Dankvert, explicó que los inspectores rusos habían inspeccionado 19 empresas españolas que exportan productos animales a los países de la Unión Aduanera, de los que se dedujo que, "incluso teniendo en cuenta que es posible hacer algunas concesiones", el 62% de los productos no cumplen con sus requisitos.
En este sentido, añadió que si se tienen en cuenta las incumplimientos relacionados con que el seguimiento en laboratorio de los productos exportados de acuerdo a las normas europeas, "ninguna de las industrias inspeccionadas supera las pruebas".