Festín astronómico en diciembre: cinco planetas se dejarán ver en el cielo

En diciembre tendremos una fiesta de planetas y lluvia de estrellas. Tras la luna llena conocida como Luna Fría que brilló el pasado jueves, el resto del mes se dejarán ver cinco planetas y los meteoros de las Gemínidas cruzarán el cielo nocturno.

El festín planetario empezará este fin de semana, a medida que los cielos se oscurecen tras la puesta de sol. La luna irá menguando y, al mismo tiempo, se harán más visibles Mercurio, Venus, Marte, Júpiter y Saturno.

Cinco planetas se dejarán ver en el cielo en diciembre

“Al amanecer, quizá puedas ver a Marte a poca altura sobre el horizonte oeste”, informan desde el Real Observatorio de Madrid, perteneciente al Instituto Geográfico Nacional (IGN).

El resto de los planetas podrá verse casi a simple vista sin necesidad de telescopios al anochecer, unos 45 minutos tras la puesta de sol. El más brillante, y que aparecerá más alto en el cielo, será Júpiter, mientras que Venus y Mercurio estarán más cerca del horizonte, y Saturno entre medias.

“Debido al ángulo que los planetas toman en el cielo, será mucho más fácil para aquellos en el hemisferio sur ver Mercurio y Venus que para nosotros en el hemisferio norte”, informa Earth Sky.

“Marte, Júpiter y Saturno han sido visibles todo el mes. Marte es un punto de luz rojizo brillante, y está actualmente en su punto más brillante durante dos años”, continúa.

Lluvia de estrellas Gemínidas

La lluvia de las Gemínidas alcanzará su máximo la noche del 14 al 15 de diciembre, por lo que “lo mejor será observarla las últimas horas antes de medianoche para evitar la presencia de la Luna”, aconsejan desde el IGN.

Para ver los meteoros, que podrán ser muy numerosos, busca un cielo lo más oscuro posible, alejado de la contaminación lumínica de las ciudades y sin objetos a la vista, y dirige la mirada al lado opuesto de la Luna para evitar que deslumbre y te impida ver las estrellas fugaces.

Los científicos descubrieron que esta lluvia de estrellas procedía de un asteroide (llamado Faetón), a diferencia de la mayoría de meteoros, que proceden de cometas. Además, se trata de una de las lluvias de meteoros de más actividad del año, junto con las Cuadrántidas de enero y las Perseidas de agosto.