El nuevo 'typical Spanish': así reaccionan los extranjeros en redes sociales a las costumbres españolas

Tipi-tipi, typical Spanish, ay, con mucho typical, cantaba Marisol. Medio siglo después, otros tópicos continúan con el asunto en TikTok y otras redes sociales, aunque ya no con la historia de una alemana que se enamora de un torero. Quienes la narran son los que nos visitan y reaccionamos con la misma complacencia o indignación de entonces, según el caso.

Lo llaman choque cultural. No es nada dramático; se compone de esas cosas de la vida cotidiana tan normales que nosotros ya ni percibimos. “En España las secadoras no son normales, el sol seca tu ropa. Cuelgas tus toallas, tus pantalones y en unas horas vuelves y están secos… ¡gracias al Sol!”, cuenta con incredulidad una joven en un vídeo compartido por redes sociales.

“Estoy visitando España y… ¿esta gente son criminales?”, comenta en otro vídeo con ironía una turista, sorprendida por la vida urbana de Barcelona: “Niños jugando a la pelota en la calle, estorbando al tráfico,…”.

A veces los casos de choque cultural tienen lecturas distintas, como la supuesta falta de costumbre que tenemos en España por dar las gracias. La pareja de @carmeninuk, británico, se quedó contrariado “cuando a una persona le abría la puerta y no le decían thank you”.

Sin embargo, @smithsinspain vive con alivio no tener que ser tan formal en el trato cotidiano, por ejemplo a la hora de responder a un mensaje. Apunta que en su país, Estados Unidos, la gente se disculpa si tarda en contestar pero que en nuestro país “la culpa se ha esfumado”: “Siento que aquí no es necesario sentir esa presión de tener que responder a la gente inmediatamente (…) Vivir en España me ha enseñado lo importante que es estar presente y no preocuparse de la puntualidad”.

A la tiktoker argentina @conifach fue la frecuencia con la que se bebe cerveza lo que le sorprendió: “El nivel de ingesta de alcohol es alucinante, y eso que vengo de Argentina. Lo peor de todo es que los chicos laburan y al país le va espectacular (…) Para mí, que hay algo genético. No sé cómo lo hacen, son una raza avanzada".

La creadora de contenido @Mad4Yu, originaria de China pero residente desde hace años en España recordaba con las lluvias de estos días un día lluvioso de Madrid, cuanto entró en su facultad: “Al entrar en la clase abrí mi paraguas y los compañeros se volvieron locos y me empezaron a gritar”. Después le contaron la superstición española sobre abrir un paraguas debajo de un techo. En China, cuenta, “lo que solemos hacer es dejarlo abierto para que se seque mejor”.

A este gusto por compartir episodios de choque cultural no se ha resistido ni el influyente Financial Times. En su caso, con un artículo sobre el esquivo significado de la palabra “tarde” en español. “En España no hay una palabra para afternoon. La tarde no es un segmento definido de tiempo antes de la noche (…) La tarde reina sobre todo, es un concepto amorfo que se extiende sobre una parte del día tan grande que en otros idiomas necesitan dos palabras”, comenta Barney Jopson, autor del artículo y conocedor de nuestro país y a quien un ministro español reconoció que si decía “buenas tardes” al empezar una intervención a las 12:00 del mediodía la gente le miraba raro.

“Muchos dicen que la tarde empieza a las 14.00. Pero también hay una facción de las 16:00. Y luego están los ‘comidistas’ que no dividen el día por horas sino por comidas, “que en España suelen se largas, tardías y llenas de convivencia”.

“Una comida con clientes empieza con cerveza, continúa con vino y termina con un chupito de pacharán seguido por un gin-tonic en el bar de al lado. Luego se vuelve a trabajar a las 18:00. Le haces eso a un pobre americano y está borracho, dormido y se quiere ir a casa”, comenta.

Al menos revela a sus lectores anglosajones que “la famosa siesta española no es tan común como pensáis. Las únicas personas que conozco que echan cabezadas a diario están en la guardería o jubilados”. A ver si se enteran.