Acer, el cuarto vendedor mundial de computadores personales, que entregó una perspectiva positiva para la segunda mitad del año, está apostando por el nuevo sistema Windows de Microsoft y por computadoras ultradelgadas.
La compañía se está recuperando de dos trimestres consecutivos de pérdidas de abril a septiembre del año pasado y de un cambio en su administración.
Acer ha asegurado que lanzará formalmente nuevos diseños de ultrabooks y 'tablets' una vez que Microsoft coloque su sistema en el mercado, algo que se espera para el cuarto trimestre, y los primeros envíos comenzarían en agosto.
La primera serie de productos con Windows 8 usará los chips de Intel, mientras que los basados en ARM no estarán en el mercado hasta 2 ó 4 meses después, para el primer trimestre del próximo año.
"Finalmente la pareja (Windows e Intel) recuperan su relación", ha asegurado el presidente de Acer, J.T. Wang, a periodistas. "Estamos más familiarizados con el ecosistema de Windows, nuestra cadena de suministros está también principalmente en el ecosistema Windows", ha agregado.
Wang ha dicho que Acer no tiene planes hasta ahora de lanzar dispositivos que no sean 'tablets' usando diseños de ARM. Acer presentará nuevos modelos de 'tablets' en diseños de pizarra y convertibles - con o sin teclados convencionales - basados en el sistema Windows 8 en la feria Computex este año, además de dos ultrabooks táctiles.
Acer también ha confirmado que los precios de estos nuevos dispositivos se anunciarían tras el lanzamiento del Windows 8. Pero en una presentación, la compañía ha destacado que el ultrabook táctil costaría a partir de 1.799 dólares (unos 1.448 euros), un precio significativamente superior que los que hay actualmente en el mercado.
Los ultrabooks son ordenadores portátiles ultradelgados similares al Macbook Air de Apple.