Cómo será la enorme isla artificial Lynetteholm que construirá Dinamarca

  • El Parlamento de Dinamarca aprueba la construcción de la isla artificial Lynetteholm

  • El proyecto de construcción más grande en la historia de Dinamarca finalizará en 2070

  • La isla artificial podría albergar hasta 35.000 personas y tendrá casi tres kilómetros cuadrados de extensión

El Parlamento de Dinamarca ha aprobado la construcción de la isla artificial Lynetteholm, en una antigua zona industrial del puerto de Copenhague. Los daneses ya están preparándose contra el aumento del nivel del mar con esta especie de barrera artificial que protegerá a la capital, pero que ha levantado mucha controversia.

La isla artificial Lynetteholm, con 2,8 kilómetros cuadrados de extensión, estará al norte de la isla Refshaleoen. Tendrá capacidad para alojar a 35.000 personas y servirá de 'dique' de protección de la capital danesa contra inundaciones por aumentos en el nivel del mar. Además, podrá resolver los altos precios de la vivienda por el aumento de la creciente demanda.

Las autoridades danesas calculan que este será el proyecto de construcción más grande en la historia de Dinamarca finalizará en 2070, y costarán unos 20.000 millones de coronas, alrededor de 3.300 millones de dólares.

La isla artificial Lynetteholm albergará 20.000 nuevas viviendas para 35.000 personas y estará conectada con el resto de la capital danesa mediante una línea de metro, un túnel portuario y una carretera de circunvalación.

Los ambientalistas, contra la isla artificial de Lynetteholm

El proyecto ha provocado gran controversias y críticas en la sociedad danesa y entre grupos ambientalistas por el riesgo de que la gigantesca obra provoque el aumento de la contaminación en la zona y el impacto negativo en la calidad del agua y los ecosistemas locales.

La iniciativa ha sido impugnada ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, debido a que las Evaluaciones de Impacto Ambiental que consideran insuficiente al abarcar solo el impacto de la construcción de la isla y no el de las infraestructuras, las viviendas y otros desarrollos urbanísticos previstos, según publican los medios daneses.