Un descubrimiento accidental sugiere una población oculta de curiosos objetos cósmicos

  • Científicos han descubierto por sorpresa 'El Accidente', una curiosa enana marrón

  • Este objeto no es un planeta ni una estrella, y es invisible al ojo humano

  • Los astrónomos piensan que es extremadamente antigua y se mueve veloz alrededor de la galaxia

Las enanas marrones no son del todo estrellas ni planetas, y un nuevo estudio sugiere que podría haber más de estos curiosos objetos cósmicos acechando en nuestra galaxia de lo que los científicos pensaban anteriormente. Todo empezó con el descubrimiento inesperado de ‘El Accidente’.

La investigación, publicada en la revista científica 'The Astrophysical Journal Letters', ofrece una explicación tentadora de cómo surgió un objeto cósmico peculiar llamado WISEA J153429.75-104303.3, apodado "El Accidente". El Accidente es una enana marrón. Aunque se forman como estrellas, estos objetos no tienen suficiente masa para iniciar la fusión nuclear, el proceso que hace que las estrellas brillen. Y aunque las enanas marrones a veces desafían la caracterización, los astrónomos conocían bien sus características generales… Hasta que encontraron este.

Una enana marrón diferente a las demás

El Accidente obtuvo su nombre después de ser descubierto por pura suerte. Pasó las búsquedas normales porque no se parece a ninguna de las más de 2.000 enanas marrones que se han encontrado en nuestra galaxia hasta ahora.

A medida que las enanas marrones envejecen, se enfrían y cambia su brillo en diferentes longitudes de onda de luz. No es diferente de cómo algunos metales, cuando se calientan, pasan de un blanco brillante a un rojo intenso a medida que se enfrían, explica la NASA en un comunicado. El Accidente confundió a los científicos porque era débil en algunas longitudes de onda clave, lo que sugiere que era muy frío (y viejo), pero brillante en otras, lo que indica una temperatura más alta.

"Este objeto desafió todas nuestras expectativas", dijo Davy Kirkpatrick, astrofísico de IPAC en Caltech en Pasadena, California. Él y sus coautores postulan que El Accidente podría tener entre 10 mil millones y 13 mil millones de años, al menos el doble de la edad promedio de otras enanas marrones conocidas. Eso significa que se habría formado cuando nuestra galaxia era mucho más joven y tenía una composición química diferente. Si ese es el caso, es probable que haya muchas más de estas antiguas enanas marrones al acecho en nuestro vecindario galáctico.

El Accidente es ‘invisible’

El Accidente fue detectado por primera vez por el Explorador de Levantamiento Infrarrojo de Campo Amplio de Objetos Cercanos a la Tierra (NEOWISE) de la NASA, lanzado en 2009 bajo el nombre de WISE y administrado por el Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en el sur de California. Debido a que las enanas marrones son objetos relativamente fríos, irradian principalmente luz infrarroja, o longitudes de onda más largas de lo que el ojo humano puede ver.

Para descubrir cómo El Accidente podría tener propiedades tan aparentemente contradictorias, algunos sugirieron que hace mucho frío, otros indican que es mucho más cálido, los científicos necesitaban más información. Entonces lo observaron en longitudes de onda infrarrojas adicionales con un telescopio terrestre en el Observatorio WM Keck en Hawái. Pero la enana marrón parecía tan débil en esas longitudes de onda que no pudieron detectarla en absoluto, aparentemente confirmando su sugerencia de que hacía mucho frío.

A continuación, se propusieron determinar si la penumbra se debía a que El Accidente estaba más lejos de lo esperado de la Tierra. Pero ese no fue el caso, según las mediciones de distancia precisas de los telescopios espaciales Hubble y Spitzer de la NASA.

Un objeto “extremadamente antiguo”

Habiendo determinado la distancia del objeto, a unos 50 años luz de la Tierra, el equipo se dio cuenta de que se está moviendo rápido, alrededor de 800.000 km/hora. Eso es mucho más rápido que todas las otras enanas marrones que se sabe están a esta distancia de la Tierra, lo que significa que probablemente ha estado dando vueltas alrededor de la galaxia durante mucho tiempo, encontrándose con objetos masivos que la aceleran con su gravedad.

Con un montón de evidencia que sugiere que El Accidente es extremadamente antiguo, los investigadores proponen que sus extrañas propiedades no son extrañas en absoluto y que pueden ser una pista de su edad.