En su análisis, el Jurado ha valorado las fortalezas y debilidades de las ciudades candidatas, inclinándose por Cáceres destacando que "el dossier de Cáceres pone en valor la importancia y variedad del producto agro-alimentario genuino".
El fuerte respaldo conseguido por la candidatura de Cáceres ha sido tomado muy en consideración por el Jurado. Este apoyo se ha concretado a través de una aportación económica destinada a la promoción del turismo gastronómico. Este compromiso garantiza la realización de las actividades programadas y otras por realizar.
El jurado, además, valora muy positivamente la importancia que las autoridades extremeñas conceden al turismo gastronómico, desarrollando novedosos productos turísticos como las Rutas Gastronómicas Singulares, los museos y centros de interpretación gastronómicos y el fomento de cocinas tan singulares como la Sefardita, la Monacal, la Pastoril y la Transfronteriza.
A criterio del Jurado "Cáceres es una joya patrimonial y un escenario idóneo para albergar eventos turísticos y gastronómicos de proyección internacional y ostentar este galardón".