Pues bien, Francisco Rivera, que estuvo en un balcón muy cercano al de Kiko viendo una procesión, ha querido callar los rumores sobre la supuesta mala relación con su hermano. El extorero ha asegurado que no somos conscientes de las vueltas que hay que dar para ir de un balcón a otro y que esa fue la única razón por la que no se saludaron, pero que en cualquier caso, su hermano Kiko y él si se hablan y todos están en Sevilla disfrutando de lo que más les gusta, que es la Semana Santa.
Además, Francisco Rivera dice estar disfrutando mucho cada día de cada hermandad, aunque espera con muchas ganas que llegue la madrugá. Pudimos verle marcharse, tras ver un paso, caminando junto a su esposa Lourdes Montes por las calles de Sevilla, y es que está viviendo con mucho entusiasmo su primera Semana Santa de casado, aunque seguramente será aún mejor cuando llegue su hija Cayetana, ya que según ha explicado él pasará con ella 'la mitad de las vacaciones'.