La Institución Smithsonian sirve de telón de fondo para la nueva comedia de Ben Stiller

AGENCIA EFE 22/05/2009 13:36

De la mano de Stiller y tras un acuerdo con 20th Century Fox, el Smithsonian levantó la veda al cine comercial y abrió sus puertas al elenco del filme, rodado en parte en el Museo Nacional de Aeronáutica y del Espacio y en el que cobran vida incontables objetos de la colección de más de 136 millones de obras del mayor complejo de museos en el mundo.

Esta segunda parte de la saga de "Nigth at the Museum" (2006) cuenta nuevamente con la dirección de Shawn Levy (Pantera Rosa) y las actuaciones estelares de Stiller, Amy Adams, Robin Williams, Owen Wilson, Rick Gervais y Hank Azaria, entre otros.

Pero, a juzgar por los críticos, la película con seguridad agradará a los más pequeños -contiene mucha acción, fantasía y efectos especiales-, pero se queda muy corta en comparación con la primera película.

En esta nueva versión, Stiller regresa en el papel de Larry Daley, un guardia de seguridad que, junto a sus amigos de cera, encabeza una épica batalla contra las fuerzas místicas desatadas por la tableta dorada del malvado faraón Kahmunrah (Azaria), que da vida a los objetos inanimados con la caída del sol.

Tanto los realizadores de la película como el Smithsonian esperan que ésta tenga la misma magia que tuvo la primera parte, tomando en cuenta que la asistencia al Museo de Historia Natural de Nueva York -donde se filmó- se disparó en un 20 por ciento.

Sin embargo, los críticos coinciden en que "Night at the Museum: Battle of the Smithsonian" desperdicia el talento y comicidad de Stiller aunque, ante un voraz apetito por una buena comedia, hay que resignarse hasta que salga un filme más memorable.

Williams, operado recientemente del corazón, interpreta a Teddy Roosevelt y, durante un encuentro con la prensa la semana pasada, no ocultó su entusiasmo por regresar a la pantalla grande.

La película también invita a un paseo, en blanco y negro, por los bulevares de París en la década de 1950, y da protagonismo a algunos de los artefactos más reconocidos del Smithsonian, entre éstos el avión rojo de la intrépida aviadora Amelia Earhart, interpretada por Adams, y el de los hermanos Wright.

Pero, con todo el caos, el derroche de efectos especiales y el escaso desarrollo de algunos personajes, los críticos no se cansan de advertir de que la vieja fórmula de que "más es mejor" fracasa en esta segunda entrega de "Night at the Museum".

Eso es algo que ni la belleza y esbelta figura de Adams pueden salvar.

El cine es un negocio, claro está, y allí yace otro gran problema: este fin de semana, que además es un largo puente debido al festivo del próximo lunes, la película tendrá que disputarse el primer lugar con "Terminator Salvation", que se estrenó el jueves.

"Terminator Salvation", cuarta entrega de la célebre franquicia de ciencia ficción, llegó a los cines con Christian Bale, un imán para la taquilla que afronta el reto de llevar el peso de una saga asociada para siempre al protagonismo de Arnold Schwarzenegger.

Bale da vida en el año 2018, tras el día del Juicio Final en el que las máquinas prácticamente arrasaron a la humanidad, a John Connor, todo un mercenario de guerra consciente de que debe convertirse en el líder de la Resistencia humana.

Los estudios prevén una recaudación conjunta, con la ayuda del Memorial Day (el lunes es festivo en el país), de más de 150 millones de dólares (107 millones de euros) entre las dos películas.

La primera parte de "Night at the Museum" logró recabar cerca de 251 millones de dólares (180 millones de euros), pero cabe la posibilidad de que "Terminator" le corte las alas a esta nueva versión.