Tomás Cordero, según se recoge en el catálogo de la muestra, cuenta con la peculiar habilidad de llevar a la máxima rotundidad la definición formal y cromática de sus manchas, con lo cual muchas de ellas parecen emerger fuera del plano bidimensional, como si se tratara de elementos de un mosaico resultante de un collage con distintos espesores, según ha informado la Diputación en una nota.
Esta ilusión de la tercera dimensión nos lleva a abordar uno de los aspectos fundamentales de la constitución de un cuadro abstracto, salvo, por supuesto, cuando se trata de puros monocromos: la relación que une las formas con el fondo.
En muchos cuadros de esta exposición, difícilmente podemos apreciar la presencia de esta relación puesto que el fondo es casi inexistente. Como haciendo de fondo vemos el "mosaico" de colores y formas expandirse en toda la superficie del plano con apenas rupturas de continuidad, salvo las que produce la existencia ficticia de algún relieve. De ahí la importancia que cobra esta impresión de tri-dimensionalidad, pues las formas que parecen haber sido incorporadas mediante la técnica del collage son las que convierten a las demás en una especie de fondo plano.
La muestra podrá ser visitada hasta el próximo 8 de julio con horario de 14,30 a 20,30 horas los martes, de 09,00 a 20,30 de miércoles a sábado, y de 09,00 a 14,30 horas los domingos.