La que fuera esposa de Sir Paul McCartney relató en el programa de televisión 'Newsnight' de la cadena BBC que en 2001, cuando todavía estaba casada con el músico, un periodista filtró un mensaje privado de la pareja.
Al parecer Heather y Paul tuvieron una discusión aunque más tarde él fue quien quiso hacer las paces y le dejó un mensaje en su contestador. Más tarde la joven recibió una llamada de un periodista que le contó "literalmente el mensaje".
Fue entonces cuando se percató de que había alguien que tenía acceso a tu teléfono y no dudó en amenazar al reportero con llamar a la policía si esa noticia veía la luz. El trabajador entonces reconoció que sí había habido una escucha pero prometió no publicar nada sobre la misma.
Heather señaló en el programa: "De ninguna manera hubo una forma honesta por la que Piers Morgan -el por aquel entonces director del rotativo- podría haber obtenido esa grabación, de la que se vanaglorió con tanto orgullo, a menos que hubieran interceptado los mensajes de mi contestador".
Por su parte, desde el Grupo 'Trinity Mirror' han querido dejar claro que todos sus periodistas trabajan "ajustándose a la ley".
Este nuevo escándalo reabre el debate sobre lo medios ilícitos con los que se trata de conseguir información en exclusiva. Las escuchas ilegales costaron el cierre al diario 'News of the World', propiedad del magnate de la comunicación Rupert Murdock.