Paulina Rubio y Ortega Cano, los accidentes más polémicos

EUROPA PRESS 02/07/2011 09:02

MADRID, 2 (EUROPA PRESS - Sandra del Caño Morales)

Si a principios de esta semana nos llegaba la noticia de que Paulina Rubio había tenido un accidente de tráfico cerca de una playa de Miami y se había enfrentado a los policías que se personaron en el lugar, hace unos días hemos podido saber que José Ortega Cano triplicaba la tasa de alcohol permitida en el momento de su accidente.

Tras el choque que sufrió la artista con su coche hace unos días, varias publicaciones apuntaron a que Paulina fue arrestada y tendría que compadecer ante la justicia, aunque su esposo Nicolás Vallejo Nájera salió a defender a su mujer desmintiendo todo lo que se había dicho hasta el momento y pidiendo a la gente que esperara a leer el comunicado oficial.

Al parecer, la cantante mexicana se vio involucrada en un accidente de tráfico cerca de una playa de Miami del que no fue culpable, pero sí se resistió al arresto por lo que los policías levantaron cargos contra ella.

Ante tales informaciones, Colate se apresuró a decir: "Está muy bien. Simplemente le han dado un golpe con el coche", eximiendo de toda culpa a Paulina. Por su parte, la madre de la artista añadió que los medios debían esperar a que la mexicana mandara un comunicado oficial en el que aclarara todo lo sucedido.

Finalmente, los últimos datos aportados han sido en forma de vídeo colgado en Youtube por un viandante en el que aparece un BMW azul plateado y una joven acompañando a un grupo de policías, que podría ser Paulina o su prima. El caso es que la chica pasó una hora dentro del coche policial.

Hasta ahora no tenemos noticias de la protagonista, pero de no probar su inocencia, tendrá que enfrentarse a varios cargos por desorden público, obstrucción de la justicia y negarse a obedecer a la autoridad.

ORTEGA CANO TRIPLICABA LA TASA DE ALCOHOL

El análisis de la muestra de sangre extraída a José Ortega Cano tras el accidente de tráfico del pasado mes de mayo que se saldó con un fallecido, ha arrojado un resultado de 1,26 gramos de alcohol etílico por litro de sangre, cuando la tasa máxima permitida es de 0,50, con lo cual el matador de toros duplicaba y casi triplicaba lo permitido en el momento del accidente.

Además, hay que recordar que el juez que lleva el caso cuenta con tres llamadas de denuncia que se realizaron al 112 desde tres vehículos diferentes "que identifican el turismo del torero al detalle sin equívoco alguno" y en las que el denominador común es denunciar una "presunta conducción temeraria", es decir, "conducción irregular, continuos zig-zag, invasión continua y reiterada del carril contrario, así como doble adelantamiento en línea continua a alta velocidad".

Después de que toda esta información viera la luz, la familia del torero ha cuestionado y expresado sus dudas acerca de la validez de la prueba de alcohol a la que fue sometido el ganadero, insistiendo en que es "necesario" saber "cómo y en qué" condiciones se ha extraído la muestra, así como conocer la manera en que se ha custodiado su análisis.

Por su parte, la familia del fallecido Carlos Parra tomará acciones legales contra el diestro por un presunto delito contra la seguridad del tráfico y un delito de homicidio imprudente.