Esta semana ha comenzado en Beijing la Semana Internacional de la Moda de China, donde se presentan las nuevas colecciones para este otoño-invierno 2009. Una pasarela que desprende como color clave el dorado, tanto en macrocollares como en la ropa.
Alrededor de 20 firmas protagonizan el gran evento, que cuenta con unos 500 modelos para mostrar las colecciones. Además, las últimas creaciones de los diseñadores chinos tienen una clara proyección internacional.
En el primer desfile se han presentado unos hilos de oro que cubren el cuello y hasta las piernas completas, una forma original de unir la moda y la inversión más segura en estos tiempos de crisis. Los jóvenes diseñadores asiáticos han optado por propuestas arriegadas con mucho glamour, inspirados en "guerreras" y con diseños geométricos.