Millones de usuarios han podido emocionarse en las redes sociales con el vídeo de este gato, cuyo dueño había fallecido hacía un tiempo. En el momento en que vuelve a verle en la pantalla de un móvil, el felino restriega su cara en el teléfono y se acurruca junto a la pantalla en una imagen llena de ternura. Hay amores que nunca mueren.