Dani Mateo hace balance: "Lo guay de hacer monólogos es desnudarse y no estar cachas, tener un cuerpo ridículo"

EUROPA PRESS 06/02/2015 17:05

El nuevo espectáculo ofrecerá únicamente tres funciones en Madrid, en la que el catalán abordará temas como el sexo, la familia, la religión, la educación, el entretenimiento, el desconcierto del ser humano frente a los cambios tecnológicos... "el sexo otra vez", todo ello desde la perspectiva de los 36 años que "han configurado su mirada como monologuista".

En el escenario le acompañará el conjunto musical 'Jimmy Barnatán & The Cooconers' para "amenizar" el espectáculo, según ha indicado el humorista.

"En el monólogo, repaso mis grandes obsesiones en estos 36 años y es brutal porque sigo siendo el mismo --ha explicado en una entrevista con Europa Press-- He ido mirando y la mirada sigue siendo la misma desde que era un niño hasta ahora, esa mirada infantil que distorsiona las cosas y las hace muy grandes y a la vez muy ridículas".

En este sentido, ha asegurado que le encantaría ser capaz de "hacer ese humor muy agresivo y que condena" pero que, en cambio, lo que le sale es reírse de sí mismo. "Creo que me gusta mucho eso, le estoy pidiendo a la gente que venga a reírse de mi".

Para el catalán, según su experiencia de diez años contando chistes, "lo guay del monólogo es desnudarse y no estar cachas, tener un cuerpo ridículo". Así, ha puesto como algunos de sus referentes a Woody Allen, Louis CK.

De todos modos, se ha mostrado convencido de que lo que le ocurre a él y el modo en que ve la vida "en realidad es muy normal" y que el público de sus funciones lo que dirá es: "eso es lo que yo pienso".

Aún así, ha pedido que "nadie se ofenda". "El que venga a ver este espectáculo que esté preparado para reírse de él mismo, ¿eh? No quiero gente que venga a ofenderse", ha declarado.

"NO HAY TEMAS TABÚ, HAY CHISTES MALOS"

De hecho, ha asegurado que nunca hace humor "intentando ofender" y que, aunque trate "temas tabú" hay otros con los que no se atrevería a hacer chistes.

"Por ejemplo, no me atrevo a hacer chistes sobre la enfermedad porque aún no soy lo bastante buen cómico. Si fuera lo bastante buen cómico y fuera capaz de hacer un chiste sobre parálisis cerebral y que se riera con él un tío con parálisis cerebral, entonces olé por mi", confiesa.

A su juicio, cuando se mira cualquier tema "con las gafas de la risa nada es demasiado grave". "No hay temas tabú, hay chistes malos", ha matizado.

En la mayoría de los temas que aborda desde el humor en los escenarios, ha explicado que "lo único que hay que hacer es ponerse unos globos en las orejas y elevarse un par de metros". "En el momento en que tú te elevas, y para eso sirve la comedia, te puedes reír. ¿Tú sabes la risa que damos?".

Según él, "es una experiencia terapéutica" cree que todo el mundo debería "tomar conciencia de la poca importancia que tiene uno y de lo corta que es la vida". "Si eso entrara en la agenda política en algún momento, tomaríamos medidas para hacernos entre todos la vida un poco más agradable", añade.

Mateo ha explicado que no trata temas políticos en sus monólogos porque los considera "los más pequeñitos de todos los temas". Aún así, ha reconocido que él mismo "tiene que hacer un esfuerzo" por "tomar distancia" de la percepción dominante, que dice que "lo importante no es vivir ni reírse, lo importante es ser un tío importante, hacer muchísimo dinero, la globalización, la competitividad".

"Vivimos convencidos de que vamos a vivir siempre y de que todo este mundo que hemos creado es súper importante", ha lamentado. El humorista ha reivindicado la risa como un "acto de rebeldía" contra la concepción de que "risa no conviene, conviene el miedo, porque cuando te ríes te sientes muy liberado".

"Un tío sonriendo por la calle es el último bastión de la resistencia. Cuando le ves piensas: ¿A dónde irá ese hijo de puta?", ha asegurado.

Por ello, ha invitado a quienes quieran acudir a su nuevo 'show' para hablar de "los temas universales, los verdaderamente importantes", que, a su juicio, son "la vida, el amor, el sexo, la religión incluso (que es muy cómica), las relaciones humanas...".

"Básicamente es una radiografía de un tipo ridículo que soy yo a lo largo de dos horas --ha bromeado-- yo esperaba soltarles en una hora y media pero puede que se alargue un poco más. Pero bueno, hay música para hacerlo más ameno".